Nombres, Nombres y ... Nombres/ SCT buscará arrancar antes de junio licitación del tren suburbano Buenavista-Cuautitlán

AutorAlberto Aguilar

EL PROCESO DEMOCRATICO que se vive, lamentablemente se ha traducido en freno para una gran cantidad de inversiones, rezagándose en muchos aspectos la infraestructura de que dispone el país. De ahí que cada vez sea más importante el apretar el paso para comenzar a reducir la brecha que ya se tiene en ese aspecto.

Por lo anterior, la SCT que encabeza Pedro Cerisola, empuja una serie de proyectos ferroviarios orientados a dar servicio a pasajeros. No hace mucho arrancaron las primeras corridas del Expreso Maya, que es manejado por empresarios de Yucatán y que pretende dar un servicio regular Mérida-Palenque-Villahermosa. También en Querétaro, con inversionistas locales, se han hecho las primeras pruebas para el Expreso Independencia, con el que se busca conectar esa ciudad con Guanajuato y SLP.

Esos servicios se sustentan en convenios con los concesionarios de carga, entiéndase TFM de José Serrano, Ferromex de Germán Larrea y Ferrosur de Carlos Slim.

Pero en ese contexto hay una obra que tendría prioridad este año, tras de posponerse en más de una ocasión. Se trata del famoso Tren Suburbano que conectará el DF con el Estado de México. A través de la subsecretaría que encabeza Aarón Dychter, la idea es hacer lo que sea necesario para arrancar formalmente su proceso de licitación antes de que concluya la primera mitad del año.

Este es uno de esos prospectos del que se ha hablado hasta el cansancio, pero que por falta de voluntad no se ha logrado concretar, no obstante las enormes necesidades de transporte que hay en la capital y en su zona conurbada con el Estado de México.

Desde el 2001 ya había contactos entre el Gobierno del controvertido priista Arturo Montiel y el de la capital a cargo del tabasqueño Andrés Manuel López Obrador. Los inversionistas a través de firmas financieras y de inversión, se han cansado de tocar las puertas para participar en el financiamiento de ese ferrocarril que en su primera etapa tendría 26 kilómetros y que significaría una inversión de 600 millones de dólares.

El reto para SCT estará en destrabar el asunto y aprovechar la buena voluntad que habría de las dos entidades involucradas para ahora sí echar andar este tren que podría modificar la situación del transporte ya de por sí compleja, dados los 9.5 millones de habitantes de la zona conurbada, más otros 8 millones que viven en la capital.

Hay la convicción de que al final de cuentas, el Gobierno tendría que subsidiar una parte de la tarifa, pero aún así se...

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