Celebran cuna de vanguardias
| Autor | Yaotzin Botello |
BERLÍN.- No puede pronunciarse el nombre de Der Sturm sin relacionarlo con un hecho legendario y fundamental para la cultura. Al menos en Berlín.
Der Sturm es sinónimo de la evolución del arte en Alemania y, quizá, en el mundo entero. Ese es el nombre de una galería berlinesa de principios del siglo 20 y de la que justo en estos días se cumplen 100 años de su fundación.
El 12 de marzo de 1912, el escritor y músico Herwarth Walden abrió la galería Der Sturm en Berlín, con lo que comenzó un capítulo en el arte moderno.
Ya desde el primer año, la galería se convirtió en un foro de lo moderno en Alemania y para el otoño de 1913 ya se había ganado un gran renombre en toda Europa.
Aquí estuvieron representados los más grandes movimientos artísticos, que empezaron con el expresionismo hasta las más variadas tendencias de los años 1920, donde había artistas de los "Caballeros azules", los futuristas, los cubistas y los constructivistas.
Los nombres son ahora de más conocidos: Kandinsky, Marc, Delaunay, Chagall, Schwitters, Feininger, Schlemmer o Moholy-Nagy, que hoy tienen cuadros en museos de todo el mundo.
La galería no sólo fue el centro del mejor arte contemporáneo de entonces, sino que era una forma de llevar nuevas tendencias a un escenario que todo mundo miraba.
El movimiento cultural que generó la galería se consolidó con las famosas Sturmabende, o las noches de galería en las que se tocaba música y se leía poesía.
"Durante unos 20 años, la galería figuró como el centro artístico de toda Europa", señala Antje Birthälmer.
Birthälmer es la curadora de la exposición Der Sturm, centro de la vanguardia, inaugurada el 13 de marzo y que concluirá el 10 de junio, en el museo Von der Heydt, de la ciudad de Wuppertal, con obra de los representantes de las vanguardias.
Fue en esa ciudad donde Der Sturm tuvo sus orígenes, pues el escritor Walden estuvo casado con una poetisa expresionista nacida ahí. En esa zona de Alemania, a las orillas del río Rin, el movimiento vanguardista ya había comenzado.
Tanto Walden como su mujer, Else Lasker-Schüler, estaban en contacto con los "Caballeros azules" y los artistas rebeldes de Viena, Karl Kraus, Adolf Loos y Oskar Kokoschka.
"Estos detalles son los que la exposición busca tocar para poder aclarar más dudas sobre cómo la galería de Berlín adquirió tanto valor", agrega Birthälmer.
La curadora de la exposición tardó más de dos años en...
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