Confinan sin reglas seguridad en obras

AutorAlfredo Páez

Unos usan costales, otros lazos, cintas o tapiales a manera de marquesina, y los menos ponen bardas metálicas o de manera.

Los constructores confinan a su manera el espacio público frente a las obras que realizan, en las cuales el peatón siempre lleva la de perder, se observó en recorridos.

De acuerdo con David Baltazar, presidente del Colegio de Urbanistas del DF, hay un vacío legal en el Reglamento de Construcciones del DF, pues sólo se establecen los parámetros de seguridad al interior de una obra y no hay normas para resguardar el exterior.

No importa si son obras de 3 ó 15 pisos, el peligro por la caída de material o herramienta sobre los caminantes siempre está latente y eso pocas veces revisa o sanciona la autoridad.

En recorridos por diversas obras, REFORMA constató que hay construcciones que roban un carril de la calle para colocar costales de arena unidos por cinta de seguridad, pues la banqueta es ocupada para realizar trabajos.

Es el caso del Instituto Nacional de Nutrición, ubicado en Av. Vasco de Quiroga, en Tlalpan, donde tiene andamios sobre la banqueta para las obras de remodelación de un edificio de 4 pisos.

En Reforma 380, la obra de un edificio de 15 pisos tiene una especie de abanico de madera que hacen la función de marquesina cada tres pisos, pero en la calle no hay protección.

La de Reforma y Lieja tiene un paso peatonal sobre la banqueta hecho con barda metálica y en la calle trafitambos delimitan el paso vehicular.

En Sófocles y Homero, en Polanco, se colocó un tapial en el primer piso de un edificio de 5 pisos, de la misma manera que en la de Cuauhtémoc 875.

El 24 de octubre el Gobierno del...

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