Cómo se crea la Constitución CDMX

AutorOctavio Ortega

Los martes, a partir de las 17:30 horas, se instala un operativo de granaderos a la entrada del Palacio del Ayuntamiento. Los policías vigilan el ingreso del grupo de notables designados por el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, para redactar la Constitución de la Ciudad de México.

Desde el 16 de febrero, la seguridad de las oficinas del gobierno de la Ciudad se refuerza cada que sesiona este grupo. Se impide la entrada a quien no trabaje en ese edificio o no forme parte del equipo presentado por Mancera el 5 de febrero.

Tres elementos no uniformados coordinan el ingreso. Uno de ellos sostiene tres hojas con un listado que incluye nombres y fotos de los notables. Confirma la identidad de cada uno, les permite entrar y palomea su asistencia.

Personajes como Cuauhtémoc Cárdenas, ex jefe de gobierno; Ifigenia Martínez, fundadora del PRD; el padre Miguel Concha, director del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria; Pedro Salazar Ugarte, director del Instituto de Investigaciones de Jurídicas de la UNAM; Juan Villoro, escritor y periodista, o la feminista Martha Lamas cruzan entre los oficiales.

La mayoría llega caminando desde las esquinas de 20 de noviembre o 5 de Febrero.

Las sesiones inician pasadas las seis de la tarde y pueden durar hasta las ocho o nueve de la noche.

A pesar de que no reciben remuneración, la participación de los notables es copiosa. No todos acuden a todas las reuniones, pero por lo general no hay más de cinco ausencias.

Porfirio Muñoz Ledo dirige al grupo de 28 notables, a quienes recibe en el Salón Oval del Palacio del Ayuntamiento, ubicado en el tercer piso del edificio. Siempre lo acompaña el consejero jurídico de la Ciudad, Manuel Granados.

El Salón Oval, sede de las reuniones, es un espacio cerrado, aislado del bullicio del Centro Histórico, la única ventana -que da a la calle 5 de Febrero-, permanece cerrada. Las paredes están pintadas en un color amarillo menos intenso que el amarillo del PRD.

El jefe de Gobierno no asiste a todas las sesiones. En algunas ocasiones, sólo se ha presentado por unos minutos, saluda y se retira.

Los notables se sientan en torno a una mesa de madera de pino en forma de O que da nombre al salón.

A la espalda de la silla del jefe de Gobierno, habitualmente ocupada por Muñoz Ledo, se aprecian los logos de la actual administración. En las tres paredes restantes hay pantallas en las que se presentan los textos con el tema que deben analizar los notables.

En las esquinas del salón se coloca el personal que auxilia en la entrega de materiales. Los notables no tienen permitido entrar con acompañantes.

Tras exponer el tema del día, se hace una ronda de participaciones; Muñoz Ledo toma notas de los comentarios, posteriormente les hace llegar minutas de las reuniones.

El 19 de abril se integraron al grupo redactor dos personas más: Xóchitl Valderrama, representante del Parlamento de la Juventud, y Humberto Lozano Avilés, presidente de Canaco en la Ciudad.

Entre los notables se reconoce que hay temas recurrentes, como el de los derechos humanos, que por su naturaleza permean distintos ámbitos.

También expresan que los especialistas en Derecho, como Ana Laura Magaloni, María Leoba, Pedro Salazar y el magistrado Juan Luis González Alcántara son los más activos en las argumentaciones sobre constitucionalidad. Además, que el padre Miguel Cocha, el fundador de Cauce Ciudadano, Carlos Cruz; Clara Jusidman, Martha Lamas y Lol Kin Castañeda destacan al hacer propuestas en materia de derechos humanos y atención a grupos prioritarios.

En la reunión del 26 de abril, el padre Miguel Concha se dijo desconcertado por el nombramiento que hizo Mancera de un segundo grupo de asesores externos, presentado el día 21. No hubo exabruptos, pero sí mostró extrañeza ante el incremento en el número de personas al trabajo.

Muñoz Ledo puntualizó que el primer grupo, el de notables, es el encargado de redactar el proyecto, y que el de asesores externos, que llamó la atención por incluir a comunicadores como Sopitas (Francisco Alanís) y Rulo (Raúl Vázquez), sólo los ayuda a proveerse de materiales.

Los notables organizaron su trabajo por temas y grupos y su objetivo es enfocar el sentido de lo que expresará el proyecto del jefe de Gobierno.

Su trabajo se desarrolla en paralelo a la campaña de los partidos y los candidatos independientes, que han hecho de la disputa por la Asamblea Constituyente una feria de promesas y ocurrencias, que van desde el internet gratuito en toda la CDMX, hasta la regulación de las marchas, el fin de la inseguridad, la desaparición de la contaminación y la llegada de servicios eficaces para todos.

Presentada como el instrumento para alcanzar una ciudad perfecta, la Constitución -que deberá ser analizada, modificada y aprobada por 100 constituyentes- se redacta en sigilo, a espaldas de esas campañas.

NOTABLES, REDACTORES Y CANDIDATOS

El grupo de notables dividió su misión en 17 temas e igual número de grupos de trabajo: desde los principios constitucionales hasta la función electoral.

El primer consenso fue determinar el detalle del articulado de la Constitución.

Clara Jusidman explica: "Hay un grupo que sostiene que tenemos que ser más explícitos. No dejar un enunciado tan general, para el trabajo de los mismos jueces, para que las personas entiendan y puedan leer sus derechos con más facilidad. Pero hay posiciones minimalistas, y la que estamos adoptando es una posición intermedia".

En lo ideológico, el consenso fue que el proyecto debe reconocer los derechos asentados en la Constitución, los del actual Estatuto de Gobierno, los que están contenidos en instrumentos internacionales y lo que expresan las leyes locales de la Ciudad; es decir, buscan que no se puedan presentar regresiones a derechos ganados.

Uno de los temas con mayor impacto y debate es el de las alcaldías; una figura inexistente hasta el momento en el país que sustituiría a las 16 delegaciones.

En sus plataformas ante el INE, los partidos plantearon la autonomía de las alcaldías, que cuenten con recursos propios y atribuciones para que se conviertan en verdaderos gobiernos de proximidad.

Cuidar los derechos y atribuciones de las alcaldías es clave, según explica el jurista Pedro Salazar.

"El desafío tiene que ver con esta dimensión de la organización de los Poderes: la delimitación y definición de atribuciones para el ejercicio de los mismos y, paradójicamente, de una buena organización de los Poderes depende una buena garantía de los derechos", explica.

Además de las sesiones de los martes, hay otras reuniones de los grupos de trabajo. Se organizaron a propuesta de los notables para poder dar trámite a todos los temas.

Se prevé que el grupo redactor trabaje hasta el 21 o 28 de junio. En la última sesión, entregará su propuesta al jefe de Gobierno.

En paralelo a los notables, un grupo de 20 asesores externos elabora documentos de análisis. Ahí destacan José Woldenberg, Jorge Castañeda, Rolando Cordera, Ángeles Mastretta, Julia Carabias, entre otros. Ellos entregan sugerencias a Juan Ramón de la Fuente, su coordinador, y éste las hace llegar a Muñoz Ledo.

Otra fuente de...

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