Crimen organizado con base social

AutorEduardo Guerrero Gutiérrez

Eduardo Guerrero Gutiérrez

Consultor en seguridad de Lantia Consultores.

A diferencia de otras entidades, la violencia en Michoacán no ha tenido su epicentro en los grandes centros urbanos, donde la ausencia de redes familiares y comunitarias sólidas explica, al menos parcialmente, la capacidad del crimen organizado para reclutar sicarios y "halcones". Por el contrario, los grupos armados ilegales en Michoacán, ya sean los Caballeros Templarios o las policías comunitarias, tienen su mayor fuerza en las ciudades medianas y en el medio rural, particularmente en la región de Tierra Caliente (tabla 1).

De diciembre de 2006 a abril de 2013, sólo 45 por ciento de los homicidios vinculados con el crimen organizado en Michoacán tuvieron lugar en los siete municipios con más de 100 mil habitantes (en contraste, a nivel nacional el 69 por ciento de estos homicidios han ocurrido en municipios con más de 100 mil habitantes). Entre los 10 municipios más violentos de Michoacán se cuentan tres con menos de 30 mil habitantes: Yurécuaro, Vista Hermosa y Tepalcatepec.

A diferencia de las grandes ciudades en otras entidades, donde la noción de "control territorial" no es más que una metáfora poco afortunada (pues este control se limita a vigilar algunas rutas e inmuebles en los que llevan a cabo sus actividades), en varias comunidades de Michoacán los grupos armados tienen capacidad para monitorear de forma continua la actividad económica y los movimientos de la población. De ahí también la eficacia con la que pueden extorsionar prácticamente a cualquier productor o empresario, infiltrar a las autoridades e incluso intervenir en procesos electorales. Junto con el control territorial, el crimen organizado en Michoacán ha desarrollado, por medio de la extorsión sistemática, una base recaudatoria amplia y estable. Las represalias a quienes no cumplen con la cuota alcanzan incluso a las empresas multinacionales. Presumiblemente éste fue el móvil del asesinato en Lázaro Cárdenas, el pasado 9 de abril, de Virgilio Camacho, alto ejecutivo de Arcelor Mittal, la mayor compañía siderúrgica del mundo.

En lugar de aprovechar la ausencia de capital social, la Familia Michoacana, los Caballeros Templarios -y más recientemente las policías comunitarias- han logrado frecuentemente que las instituciones sociales e incluso políticas de las comunidades en las que operan trabajen a su favor. En este contexto, los grupos armados tienen capacidad para ejercer un monopolio de facto...

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