Dan un destino final a los Indios Verdes
| Autor | Sergio R. Blanco y Patricia Cordero |
El alma errante de los Indios Verdes descansará a partir de septiembre en el Parque del Mestizaje, a 250 metros del paradero del Metro donde permanecieron desde 1979 y del que fueron retirados por las obras del Metrobús.
Inaugurado por los Reyes de España en noviembre de 1978, el parque alberga ya un conjunto escultórico de Víctor Manuel Gutiérrez, que incluye una fuente con las estatuas de Don Quijote y Sancho Panza.
"Las estatuas estarán muy cerca del lugar de la ciudad al que dieron nombre. En el jardín podrán ser percibidas como dos elementos escultóricos de primerísima calidad", asegura el arquitecto Vicente Flores, director de Apoyo Técnico de la Coordinación Nacional de Monumentos del Instituto Nacional de Antropología e Historia.
El INAH dio su autorización para que las esculturas de los emperadores aztecas Itzcóatl y Ahuizotl fueran instaladas en el parque, que tiene una extensión de cinco hectáreas.
El proyecto de restauración y reubicación de las estatuas diseñadas por Alejandro Casarín (1842-1907) tiene un costo de 13 millones de pesos, que cubrirá la Delegación Gustavo A. Madero y las secretarías de Gobierno y de Medio Ambiente del Distrito Federal.
Flores calcula que en tres semanas será dado a conocer el punto exacto del parque donde serán instaladas las esfinges, una vez concluido un proyecto integral que dará nuevo sentido al parque.
Rechazo popular
Debajo del polvo y la suciedad que los Indios Verdes acumularon por más de un siglo, el equipo de restauradores -dirigido por Ricardo Prado, encargado también de restaurar el Monumento a Cuauhtémoc- descubrió que el día de 1891 en que fueron instalados ya lucían un color verde intenso.
La tonalidad de la pátina original desmiente que el color que les da nombre fuera fruto de la oxidación producida por el paso del tiempo.
Casarín realizó entre 1889 y 1891 las que serían sus dos únicas esculturas conocidas, a las que no puso su firma, bañándolas con una fórmula química hecha a base de sales cuaternarias -de cobre-, que les proporcionó una pátina verdosa.
"Ahora que los destapemos verán que son verdes verdes. Fueron de ese color desde el principio", señala Prado, director técnico del proyecto de rescate y reubicación de los Indios Verdes.
Además de escultor, Casarín fue músico, pintor y caricaturista. Tras la guerra de Intervención francesa, fue deportado al país galo, donde trabajó con artistas como Meissonier, Corot y Millet.
Horacio Sentíes, cronista de la Delegación Gustavo A...
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