Escrutinio / Capital Humano Mexicano y la Gobernabilidad

AutorSergio Lujambio

Siguiendo con el planteamiento hecho la semana pasada, vinculando algunas anécdotas de la vida ordinaria y retratos de la realidad, con los reportes aparecidos del Banco Mundial relativos al descenso en indicadores de gobernabilidad, preguntaba yo a los lectores ¿Cómo la veían? Una gentil ciudadana, Sonia Aranda, me contesta que el indicador de "Rule of Law" (Rectoría de la ley) que mide el Banco Mundial, es más complejo que tan sólo índices de punidad o impunidad y respeto al Estado de Derecho, como digo en mis líneas, sino que se miden además indicadores de educación, educación cívica y algo que para ella es lo mas importante y piedra angular, que es la salud pública.

No le niego importancia a ese indicador, y confieso que me ha puesto a reflexionar sobre la trascendencia de la salud y la nutrición como básicos para la recepción de cualquier información y formación, pues estas dos vertientes de la educación están íntimamente asociadas con la construcción de capital humano. Bien cierto es que un intrauterinamente malnutrido difícilmente puede ser receptivo a aprender, pues de entrada se puede prever que tendrá déficit de inteligencia (al menos abstractiva). Más adelante en la vida, es predecible también un mal resultado educativo en un personaje con deficiencias alimenticias y de salud básicas, pues difícilmente podrá ser receptivo a valores, virtudes, visión y voluntad, que son la piedra angular de la inteligencia emocional y más importantes para el desarrollo humano y social que las primeras.

El foco pues, está puesto en el lugar equivocado. El sistema de salud pública está quebrado o en vías de estarlo. Millones no tienen acceso a éste, más que en circunstancias extremas. La educación tiene el foco en el mejor de los casos, puesto en dar información, (no en enseñar y enseñarse a buscarla, con lo que su eficiencia cognoscitiva es mucho menor) y no en dar formación. El civismo se entiende más como la construcción de íconos, mitos, símbolos, santones civiles de vidas casi mágicas, y en la reproducción de rituales que en la enseñanza de la honestidad, laboriosidad, generosidad, solidaridad, responsabilidad, la importancia de tener sueños y visiones, la trascendencia de la obligación personal, familiar y social de generar riqueza, y del fortalecimiento del espíritu y la voluntad.

No excuso a Fox de su falta de eficiencia y eficacia...

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