'Estimulan' su capacidad
| Autor | Alheli Lara |
Los acordeones dejaron de ser la herramienta principal para presentar un examen, ahora muchos alumnos recurren a estimulantes para mantenerse alerta, despiertos y "aptos" para el aprendizaje de último minuto, según estudiantes y especialistas en adiciones.
Datos del Consejo Nacional contra las Adicciones, Conadic, refieren que el 40 por ciento de los alumnos de secundaria y nivel medio superior consumen algún tipo de sustancia estimulante antes de culminar el ciclo escolar.
Recetas caseras o naturistas, cocteles, medicamentos y algunas drogas son las favoritas de los jóvenes que buscan incrementar sus capacidades y cumplir con los requisitos mínimos para pasar de año.
Estudios de la Facultad de Medicina de la UNAM indican que los alumnos de secundaria con mayor frecuencia ingieren alcohol, cafeína, refrescos de cola con aspirina o bebidas energizantes en fines de semana, fiestas y al término de curso.
Los estudiantes de nivel superior agregan a la lista anfetaminas, marihuana u otras drogas, así como extractos de ginseng; y los consumen con mayor frecuencia en época de trabajos y exámenes finales.
¿Por qué son tan famosos los estimulantes entre los escolares?
Raúl Meixueiro, especialista en farmacología de la UNAM, señala que éstos proporcionan una sensación temporal de energía, un estado de bienestar y buen humor.
"Generalmente los adquieren para mantenerse despiertos y supuestamente aprender más, de hecho, en esta época es común que los alumnos se vayan al estacionamiento o a los baños para tomarlos y salir de presiones, liberarse o desinhibirse", explica.
Problemas ocultos
La presión escolar sólo es uno de los factores que influyen en la búsqueda de estimulantes. Detrás de esta situación pueden esconderse casos de violencia intrafamiliar, miedo, inseguridad e inestabilidad, asegura Meixueiro.
Rafael Velasco Fernández, autor del texto Las Adicciones, Manual para Maestros y Padres, de editorial Trillas, señala que el perfil de los estudiantes que suelen ingerir éstas sustancias o drogas se relaciona con su lugar de residencia, disponibilidad para adquirirlas y relaciones familiares.
"También interviene su grado escolar, pues se observa con más frecuencia en el nivel medio superior, tener 18 años o más, no dedicar tiempo completo a los estudios, pertenecer a grupos de estudiantes con conductas indeseables, mostrar una actitud de aceptación hacia el consumo de drogas y tener dinero disponible para su uso personal", afirma el especialista en...
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