Entrevista/ Freddy Bernal/ 'La conspiración ya está derrotada'
| Autor | Norma Domínguez |
¿Qué está pasando en Venezuela? ¿A qué se debe el nuevo "levantamiento" de la oposición?
El país ha entrado en una controversia política fuerte, en especial este último año.
El 11 de abril, la oposición dio un golpe de Estado a las instituciones y a la voluntad de los venezolanos.
Luego de eso, y habiendo sido derrotados por el pueblo en forma pacífica y democrática, la oposición ha seguido jugando al golpismo, sosteniendo su intención de sacar al Presidente Hugo Chávez "ya y como sea", algo que el pueblo no está dispuesto a permitir.
Días atrás, hicieron una manifestación que pretendía aplicar el mismo esquema del 11 de abril: marcha, conmoción social y golpe de Estado. Pero no tuvo contundencia y se evitó cualquier tipo de descontrol. Después lanzaron un paro porque creían que podían detener al país, pero tampoco lo lograron. Creíamos que nos iban a dejar tranquilos hasta enero, pero la desesperación de esta clase política de asaltar el poder, llevó a este grupo de generales -que deberían estar en la cárcel desde hace muchos meses- a querer volver a crear caos instalándose en Altamira.
¿Cuál es entonces la posición del Gobierno frente a esta situación?
Entendemos que aunque tenemos la mayoría, hay una parte de la población que rechaza al Presidente Chávez y sus políticas. Eso está previsto dentro de la democracia. Si en Altamira se quiere concentrar la sociedad durante un día o durante una semana, puede hacerlo porque eso está dentro del marco democrático y no la vamos a reprimir.
Pero con respecto a los militares, es otra cosa: ellos están violando leyes nacionales y tienen que ser enjuiciados porque portan su uniforme. No puede ser que generales o coroneles llamen a la desobediencia civil y a la insurrección. Eso violenta el marco del Estado de derecho.
¿Qué le responde el Gobierno a la oposición sobre este reclamo de elecciones ya?
Si la oposición quiere salir de Chávez, deberá seguir la vía de la Constitución y el referéndum revocatorio del mandato, o esperar y derrotar al Mandatario en elecciones, tal como lo hicimos nosotros. Pero pretender un juego fuera de la ley para alterar los periodos del gobierno es algo que no estamos dispuestos a aceptar.
Esa clase opositora agrupa, exagerando, a dos millones de personas en todo el país. Venezuela tiene 26 millones de habitantes y por Hugo Chávez votaron más de trece millones de ciudadanos.
En las democracias gobiernan las mayorías oyendo a las minorías. Esta es la única democracia donde la minoría -que ha sido derrotada en varias oportunidades- quiere gobernar.
¿De qué forma el Gobierno invita a esta oposición a conversar para encontrar algún modo de conciliar las diferencias?
Tenemos un año abriendo el diálogo. Pero quienes dirigen parte de esa oposición no quieren diálogo, quieren un golpe de Estado.
El año pasado, el Presidente llamó al diálogo, y el señor Pedro Carmona -quien luego dio el golpe y que era presidente de Fedecámaras- dijo que no se sentaba a dialogar.
La Iglesia Católica, por medio del Cardenal José Ignacio Velasco, que firmó el acta del golpe de Estado, dijo que no iba a dialogar.
Nosotros pedimos como facilitadores a organismos internacionales. Vino Jimmy Carter...
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