ISES: Nacen enfermos seguros de salud

AutorVanessa Beltrán

La apuesta de que las Instituciones de Seguros Especializadas en Salud (ISES) serían un gran negocio para las compañías aseguradoras, parece haberse perdido.

La razón va desde excesos regulatorios, una escasa cultura de previsión financiera y de salud, hasta la falta de modificaciones a la Ley del Seguro Social.

Las ISES tienen como fin prestar el servicio de gastos médicos menores de carácter preventivo, con el fin de ser una alternativa al Instituto Mexicano del Seguro Social, tanto para las empresas, los actuales derechohabientes que buscan un mejor servicio, hasta para quienes no tienen esta prestación social, por ser informales o trabajar por cuenta propia.

Pero no han tenido el éxito esperado: Hace 3 años, existían 23 ISES ya sea en operación o en proceso de solicitud para poder operar, pero actualmente sólo hay 12.

Además, desde 2002 el volumen de las primas de los seguros de gastos médicos menores (como se conocen a los seguros que ofrecen las ISES) han registrado decrementos.

En aquel año las primas de estos seguros cayeron más del 10 por ciento; para el 2003 se redujeron en 36 por ciento, y en el primer semestre del 2004 han caído 16.9 por ciento, de acuerdo con datos de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS).

Según Jaime Larrea, director general de Vitamédica, ISES del Grupo Financiero Banamex, para que una empresa de este tipo alcance el punto de equilibrio como negocio necesita 250 mil clientes.

Sin embargo, según datos de la AMIS, actualmente las 12 participantes en este mercado tienen en conjunto 200 mil asegurados con una prima por 650 millones de pesos, que representa apenas el 0.5 por ciento de las primas totales del sector asegurador.

"El exceso de regulación y los onerosos requerimientos de reservas de capital provocan la incapacidad de esas empresas para ofrecer servicios de salud integral", aseguró el director general de la AMIS, Recaredo Arias.

Las ISES se quejan de que no les dejan trabajar eficientemente y bajar costos los múltiples requerimientos de información sobre sus operaciones por parte de la autoridad; los requerimientos de entrega de estadísticas; el exceso en la creación de reservas técnicas para hacerle frente a los siniestros, y el nivel de capital que deben invertir para poder constituir una institución especializada en salud, aunque no precisaron montos.

Si a esto se le suma la baja cultura de previsión en el País, el panorama se agrava.

La mayoría de las personas no previenen los...

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