Llega pastorela a la lucha libre
| Autor | Erika P. Bucio |
'¡Respetable público: lucharán a dos de tres tentaciones sin límite de pecados, Lucifer Endiablado y San Miguel Enmascarado!", en un combate que promete cambiar por aplausos las "mentadas de madre" del público que suele acudir a la Arena Coliseo.
Rudos y técnicos subirán el 16 de diciembre al cuadrilátero para representar la primera pastorela de luchadores, escrita y dirigida por Arturo Morell a partir de una idea de Julio Solórzano, promotor del primer Festival Navideño de la Ciudad de México que hoy inicia.
"Es la forma de conjuntar dos tradiciones arraigadas en la cultura mexicana como son las pastorelas y la lucha libre; los combates entre ángeles y diablos son como las luchas entre rudos y técnicos", explica Morell.
Desde hace tres semanas, ensaya con un grupo de 18 luchadores sin experiencia actoral. Dejó que escogieran sus personajes y les dio total libertad para que aportaran elementos a los diálogos de Lucifer endiablado contra San Miguel enmascarado.
"Van descubriendo sus capacidades histriónicas", dice Morell, satisfecho con el desempeño de los luchadores.
Los gladiadores no sólo memorizaron sus diálogos y aprendieron a moverse sobre el cuadrilátero como si fuera un escenario, sino que se pusieron a las órdenes del coreógrafo Marco Antonio Silva para montar los bailes que exige la obra.
La pastorela mantiene los elementos característicos del género pero trasladados al ámbito de la lucha libre, sin olvidarse también de la política: salen a relucir los nombres del ex diputado local René Bejarano, el proceso de desafuero de Andrés Manuel López Obrador y la reelección de George W. Bush.
"Vamos a cambiar las mentadas de madre por aplausos", afirma el luchador Pierroth, del bando de los rudos.
Ángeles contra diablos
1 En el principio de los tiempos, Dios creó la tierra, el agua, el aire, el fuego y, una vez concluido el Paraíso, creó el hombre a su imagen y semejanza... Porky.
2 En el Paraíso, el primer hombre se sentía solo, por lo que Dios le envía más luchadores como compañía. Esto no bastó para aliviar su soledad, y de un dolor de costilla, surgió la mujer.
3 Mientras Gladiador y Veneno acosan a las edecanes al grito de "¡Bizcocho!" y "¡Mamacita!", La Nazi, tirada en el suelo, implora a sus agresores: "¡Ay, no sean tan rudos!".
4 Los técnicos se enfrentan con los rudos en un combate por el honor de la mujer. Es así como aparecen el gran deporte de la creación, la lucha libre...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba