Microempresas: Negocios a lo grande
| Autor | Leticia Ríos |
NAUCALPAN.- En el Estado de México operan 300 mil micro y pequeñas empresas que en su mayoría trabajan de forma empírica, sin planeación, administración, ni presupuestos.
Son negocios que sobreviven sin objetivos de corto, mediano y largo plazo y que ante una situación de crisis resultan los más afectados.
Carecen de la denominada 'cultura laboral' para lograr la competitividad, alcanzar un crecimiento sostenido, sortear épocas difíciles o aprovechar las de crecimiento.
Alvaro Vargas Briones, director del Centro Regional para la Competitividad Empresarial estimó que solo el 35 por ciento de las micro y pequeñas empresas mexiquenses cuentan con esquemas de planeación, capacitación e información para prever a futuro.
No importa que se trate de 'changarros familiares', el punto fundamental para cualquier empresa, es la planeación, definición de metas y del mercado al que se pretende llegar.
Agregó que como parte de la planeación es necesario efectuar presupuestos estrictos que permitan determinar las entradas, salidas y utilidades.
"Es muy importante que los empresarios sepan administrar su efectivo en caja. Siempre debe tener claro cuáles son los costos fijos y variables.
"En los negocios de abarrotes, muchas veces se toma dinero de la caja sin llevar un control sobre su uso, es cuando hay fugas que pueden causar problemas", indicó Vargas.
Otra recomendación es analizar la situación en el comportamiento de los precios en el país, debido a que no es recomendable mantener inventarios cuando la inflación es estable, como ocurre actualmente.
Vargas explicó que en este caso es necesario colocar la mercancía lo más rápido posible, para mover el dinero y obtener mejores utilidades.
"Cuando hay un movimiento rápido de precios los empresarios se atiborran de mercancías, lo que hoy les cuesta 100 pesos, mañana lo venden en 200 y pasado en 300.
"Pero en épocas no inflacionarias no conviene, porque resulta costoso, es dinero invertido en mercancía que no se desplaza", comentó.
Es recomendable fijar precios determinando el punto de equilibrio, es decir, saber cuáles son los costos fijos y variables de la empresa, establecer qué cantidad se debe vender para cubrirlo y tener margen de utilidad.
Destacó que como parte de la planeación es fundamental estar informados y conocer el mercado en el que se trabaja.
"Cómo se está comportando, quiénes participan y qué están haciendo. Se logra integrándose en asociaciones y cámaras empresariales, teniendo contacto con...
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