Juan E. Pardinas / Nacionalismo y testosterona

AutorJuan E. Pardinas

La última vez que publiqué un texto en Reforma, Crimea era una región de Ucrania. Eso ocurrió en el lejano siglo del domingo anterior. En un mundo que cambia tan rápido, la semana pasada parece un tiempo distante. Hasta hace pocos días la mayor amenaza para Europa era la incipiente recuperación económica. Ahora Vladimir Putin ha convertido a la testosterona en la substancia principal de la política exterior rusa. El ex espía de la KGB sacó su lápiz y goma para redibujar las fronteras de Europa.

Ucrania está a ocho husos horarios de distancia de México. Sin embargo, la agresión de Moscú tendrá consecuencias en distintos rincones del orbe. Con su valentonada, Vladimir Putin se ha convertido en un héroe involuntario en la lucha por reducir las emisiones de carbono y el calentamiento global. La causa a favor de las energías menos contaminantes debería erigirle un monumento al aspirante a Zar. Rusia es el tercer productor de petróleo y el primer exportador de gas del mundo. Putin usa su capacidad de producción de energía como un mecanismo de presión geopolítica, igual que sus antecesores soviéticos utilizaban las armas nucleares. En 2006 y 2009, Rusia cortó sus exportaciones de gas a Ucrania para poner contra la pared a su vecino. En medio del invierno, millones de personas se quedaron sin calefacción en Europa del Este. Gazprom, el monopolio de gas ruso, perdió recursos importantes con este boicot a sus clientes pero las pérdidas financieras fueron un sacrificio en este ajedrez estratégico.

Alemania es el principal consumidor del gas ruso. El motor industrial de Europa y la cuarta economía más grande del planeta están a merced de los caprichos de Putin. Los alemanes eran una potencia en producción de energía nuclear. Sin embargo, a la postre del accidente de Fukushima en Japón en 2011, el gobierno germano decidió dejar fuera de operación toda su capacidad de generación de energía nuclear para el año 2022. Esta misma semana, varios países europeos se reunieron para discutir...

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