Pelea silenciosa por Sedena
| Autor | Luis Alegre |
Un análisis elaborado en el interior de las Fuerzas Armadas señala que hay al menos nueve Generales de División "secretariables", aunque se advierte que al menos tres de ellos tienen reducidas posibilidades por estar identificados como cercanos al ex candidato priísta Francisco Labastida y al actual Secretario de la Defensa, Enrique Cervantes Aguirre.
"En el escenario de un triunfo de Francisco Labastida, los ya seguros eran los Generales (Rodolfo) Reta Trigos, (José Angel) García Elizalde, (Humberto) López Portillo y (Juan Heriberto) Salinas Altés, todos identificados con el sinaloense y también con el Secretario (Enrique) Cervantes", señala el documento titulado "Reflexiones Sedena", del que REFORMA obtuvo una copia.
Reta Trigos y García Elizalde son los Generales con mayor antigüedad en el grado de Divisionarios según el escalafón de la Sedena y ambos fueron jefes militares en Sinaloa cuando Francisco Labastida era Gobernador.
Sin embargo, ex Generales y estudiosos de las Fuerzas Armadas coinciden en que la lista puede ser más amplia y que incluso podría considerarse la posibilidad de que un Divisionario ya retirado asumiera el mando del Ejército.
La Ley Orgánica del Ejército y Fuerza Aérea establece que para ser Secretario de la Defensa Nacional es requisito ser General de División, pero no especifica la condición de activo o retirado.
En México no hay un modelo definido para elegir al titular del Ejército, como ocurre en otros países, donde el escalafón y la antigüedad sirven para determinar que mandos pueden acceder al puesto y los Secretarios salientes se han preocupado más por recomendar a quién pueda cubrirle la espalda que en proponer a un relevo basado en su capacidad, asegura el General de División retirado Luis Garfías Magaña.
"La designación de los Secretarios se ha resuelto siempre con puro dedazo", dice el también ex Diputado perredista.
Para Raúl Benítez, académico especialista en seguridad nacional y Fuerzas Armadas, el relevo en la Sedena se basaba en un acuerdo tácito de respeto y no injerencia entre militares y gobernantes, mediante el cual los mandos del Ejército tenían autonomía para sólo presentar al Presidente electo una terna de Generales de los cuales salía el nuevo Secretario.
El cambio, señala el investigador de la UNAM, tomó por sorpresa a los Generales. "Los militares no saben hacer política, no previeron el cambio, no creyeron que PAN ganara y, por lo mismo, no hubo ningún acercamiento institucional con el ahora Presidente electo".
Ante el triunfo opositor, añade Benítez, el viejo orden militar -incluido en ello la sucesión de los mandos-, tendrá que adaptarse a nuevas reglas.
Otro General retirado -quien pidió omitir su nombre-, define la sucesión de una manera más simple: "Perdió el PRI, los que creían que iban a llegar a Secretarios perdieron también y ahora todos los Generales tienen una posibilidad".
Diferentes opciones
El documento -extraoficial- "Reflexiones Sedena", que enumera a los candidatos a dirigir un Ejército que cuenta a la fecha con 183 mil elementos, incluye aproximadamente a una tercera parte de los Generales de División en activo, de los que al menos la mitad han sido ascendidos en el presente sexenio.
Esta lista se basa principalmente en el escalafón -años de servicio y antigüedad en el cargo-, así como en el historial de cada uno: estudios realizados, mandos de tropa y administrativos, tiempo en filas, Comandancias ocupadas y servicios en el extranjero.
Los Generales con mayores posibilidades, según el citado análisis, son José Angel García Elizalde, Rodolfo Reta Trigos...
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