Vive horas negras 'reinado' Kirchner

AutorÁngel Sastre

Especial

BUENOS AIRES.- Mabel Aranda, una argentina de 71 años de origen español, riega sus plantas en su humilde casa de Lanús en la provincia de Buenos Aires.

"Quiero vender la vivienda que me dejó mi marido y mudarme a un departamento más barato, seguro y pequeño en capital. Yo voté a Néstor y Cristina, incluso me recordaba a Evita Perón, pero ahora tengo miedo a que venga otra debacle. El Gobierno nacionalizó nuestras pensiones. Estoy desencantada, no me fío", asegura.

Mabel se refiere a una de las maniobras orquestadas desde la Casa Rosada para conseguir más crédito: la absorción por parte del Estado del dinero aportado por los trabajadores a las Administradoras de Fondos de Jubilaciones y Pensiones (AFJP), empresas privadas dedicadas a administrar los fondos generados con los aportes de los jubilados.

Ésta y otras actuaciones recientes del Gobierno han mermado la popularidad de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner quien, por primera vez, se enfrenta a un dilema sin precedentes: cómo gobernar sin dinero y sin mayoría en el Congreso.

'Complot'

La urgencia de los Kirchner por hacer caja se ha encontrado además, con la resistencia de algunas instituciones. El último organismo en rebelarse fue el Banco Central, llegando incluso a recurrir a la Justicia para paralizar un decreto que dispone la entrega de 6 mil 569 millones de dólares procedentes de las reservas destinados a pagar parte de la deuda de este año. Al final, el dirigente del organismo, Martín Redrado, presentó su renuncia que será validada esta semana por el Congreso.

"'El matrimonio K' va por el tesoro nacional para pagar deuda. Antes lo hizo con las AFJP y luego con la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES). Pero creer que el problema mayor es el decreto mediante el cual la Presidenta de la nación decidió apoderarse de las reservas es un error", comenta Armado Cabral, periodista independiente de Tierra de Fuego. "El principal problema es la violación de la institucionalidad".

La Oposición sostiene que este dinero podría ser utilizado por el oficialismo para pavimentar el camino a las presidenciales del próximo año, pero los Kirchner aseguran que todo se trata de una conspiración a gran escala en la que participan opositores, el Banco Central, la Justicia e incluso el vicepresidente, Julio Cobos.

Patrimonio sospechoso

Pero "el matrimonio K" apunta también a otro "enemigo": el diario Clarín. El periódico más leído en Argentina se ha convertido en uno de...

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