¿A dónde van a parar las 'viejitas'?

AutorJosé Barros y Verónica Valencia

Probablemente usted al igual que cientos de personas no sabe cómo deshacerse de esa computadora que ya no utiliza, y más si es el encargado de sistemas de alguna compañía y tiene como responsabilidad deshacerse de esas "viejitas" que están en la bodega.

En ese caso debería empezar por averiguar los sitios en los que le podrían recibir ese equipo o equipos, pero de antemano le mencionamos que en México no hay muchas opciones.

Salvo que se encuentre en la Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey, donde existe una mayor cultura informática, es difícil encontrar empresas u organizaciones que se dediquen a reciclar, distribuir o aprovechar este tipo de equipos usados.

De acuerdo con datos del Inegi, en el país la generación total de residuos no reciclables de origen industrial asciende a 8 millones de toneladas anuales, y una gran parte de ellos pertenece a la basura informática.

Además, México no cuenta con la infraestructura robusta para el reciclado de lo que produce la industria informática. De ahí que no sea extraño ver tiradores clandestinos en municipios o barrancas, en los que incluso se encuentran computadoras.

Monitores, impresoras, consumibles, discos compactos, unidades de disco de 3.5 pulgadas, cables, cabezas de impresoras y baterías son sólo una parte de la larga lista de productos que no tienen un lugar destinado para su reciclaje.

Lo están logrando

Pero en este contexto existen en el país algunos casos de buena administración de los equipos informáticos, uno de ellos es la institución financiera Banorte, donde diariamente se realizan un sin número de transacciones monetarias, por lo que las computadoras se convierten en el elemento principal de trabajo.

"Los ciclos de vida de los equipos están en función de su capacidad y la ciencia tecnológica que nos marca la misma industria", mencionó Eduardo Beréber García, director de servicios de tecnología de la Red.

Banorte tiene un programa para asignar o resignar los equipos obsoletos y cuando estos, ya no cumplen todas las expectativas, el área de contraloría interna se encarga de decidir si los equipos se venden entre los empleados o se donan a una institución de beneficencia.

Otra empresa nacional, Farmacias Guadalajara, tiene ciclos específicos por los que tienen que pasar sus computadoras.

La estrategia de la farmacéutica en la adquisición de equipo es comprar lo de último en tecnología con lo más nuevo en procesadores y una memoria óptima, posteriormente el que queda obsoleto se...

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