Empresa/ Una y una
| Autor | Alberto Barranco Chavarría |
El ordenamiento cuyo plazo para su publicación en el Diario Oficial se cerró ayer, será regresado a la Cámara de origen, en afán, se dijo, de mejorar los puntos que han generado conflicto.
Lo curioso es que el común denominador de ambas iniciativas aprobadas en diciembre pasado por la Cámara de Senadores, más allá del desgarramiento de vestiduras de los hombres del dinero, aduciendo que en el segundo caso se "violentan" las leyes del mercado, es que habían sido empujadas originalmente en abril del 2000 por la oposición que integraba mayoría en la Cámara de Diputados durante la anterior legislatura.
La paradoja del caso es que si entonces la pelea fue contra el PRI, cuya mayoría en la Cámara de Senadores se negó a dar cauce a la opción, hoy el valladar lo constituyó el PAN, en su nuevo rol de Gobierno.
De hecho, a la vista de la inminente derrota en la votación del pleno de la Cámara Alta -cuyo marcador fue 76 a 44-, el Senador blanquiazul Juan José Rodríguez Prats planteó una moción suspensiva, argumentando que el documento no había sido objeto de una revisión "sensata".
Previamente, otro panista, Salvador Becerra Rodríguez, había criticado el dictamen de las comisiones unidas de Agricultura y Ganadería, Desarrollo Rural y Estudios Legislativos, señalando que existían "innumerables deficiencias de redacción y argumentación".
Y al fragor del tiroteo, mientras el Senador Rómulo de Jesús Campuzano González acusaba al PRI y al PRD de saciar su "sed de venganza" tras la derrota del 2 de julio, saldría a la palestra un documento firmado por el Secretario de Agricultura, Javier Usabiaga, en el que recomendaba detener la aprobación del ordenamiento, por contravenir las "leyes del libre mercado".
Lo cierto es que el único punto a favor del PAN fue el diferimento de 1 año para la entrada en vigor del ordenamiento, que a fin de cuentas recogía en uno 380 disposiciones normativas dispersas.
Y lo cierto, por lo demás, es que la exposición de motivos hablaba de la exigencia de ofrecer "grandes definiciones" al campo mexicano frente a la acumulación de graves rezagos que le han hecho perder competividad, al punto
de resultar incosteables muchas de sus actividades.
Por primera vez, agregaba la argumentación, una ley instituye un programa concurrente, mediante la participación coordinada de todas las dependencias y organismos de las tres órdenes de Gobierno, con el objetivo de generar empleo y bienestar social hacia los habitantes del medio rural.
El...
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