Abren espacio a escultura
| Autor | José Galindo |
El escultor Federico Silva manifestó su propósito de que el museo que llevará su nombre en la ciudad de San Luis Potosí, primer espacio dedicado exclusivamente a la escultura en el País, se convierta en un instrumento de enlace del universo sensible de los mexicanos.
El 18 de septiembre, con la presencia del Presidente Vicente Fox y las autoridades de cultura, el Museo Federico Silva abrirá sus puertas al público, que podrá disfrutar de un acervo inicial de 62 piezas del escultor capitalino y de tres exposiciones temporales.
Diez piezas de gran formato de Juan Soriano serán exhibidas durante seis meses en la explanada del museo, el Jardín de San Juan de Dios y el atrio de la iglesia del mismo nombre. Manuel Felguérez presentará 14 esculturas de hierro y bronce, y se ofrecerá también una muestra escultórica de la región de la Huasteca.
El inmueble donde se encuentra el museo ocupa el lugar que desde principios del siglo 17 constituyó un hospital atendido por monjes juaninos. Después de casi tres siglos, en 1895, se convirtió en sede de una oficina aduanal, función que duró solamente 10 años. Posteriormente, el antiguo edificio fue demolido y únicamente quedó en pie la iglesia contigua.
Un nuevo edificio, proyectado por el arquitecto Antonio M. Anza, fue terminado en 1907 y utilizado como primaria hasta el 2000. El Gobernador de San Luis Potosí, Fernando Silva Nieto, explicó que únicamente 50 alumnos estudiaban en la escuela, un número muy bajo debido al despoblamiento que han sufrido los centros históricos del País.
A partir del 2001, el edificio comenzó a ser adaptado gracias a recursos provenientes del presupuesto estatal, con miras a transformarlo en un espacio propicio para la escultura.
"Estamos ante un acontecimiento definitivo en cuanto a la promoción de la escultura en México. Técnicos, museógrafos e investigadores han participado en un proyecto que así lo ameritaba", afirmó Saúl Juárez, director general del Instituto Nacional de Bellas Artes.
Silva declaró que el nuevo museo no aspira sólo a ser estatal, sino a convertirse en un museo nacional, que con el tiempo pueda recibir también la obra de artistas extranjeros.
"Este museo no constituye una ambición estrictamente estética", agregó el escultor, "su propósito consiste en multiplicar los espacios para que ocurra el fenómeno del arte. Vivimos una etapa en que intercomunicar la pasión por el arte, la voluntad humanística, es indispensable para hacer de la República mexicana una...
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