Adolfo Ferrer: 'Todos tenemos muchas ganas de ayudar'

AutorAndrea Martínez de la Vega

Mientras millones de personas verán a distancia el Mundial de Rusia 2018, Adolfo Ferrer lo vivirá desde dentro.

El estudiante de Ingeniería en Negocios y Tecnologías de la Información del Tec de Monterrey, Campus Estado de México, fue seleccionado como voluntario para el evento futbolístico más importante a nivel internacional.

Empero, no será la primera vez que participe en una competencia deportiva de esta escala: en 2016 fungió como bolero en los partidos de tenis de las Olimpiadas de Río de Janeiro.

"Yo creo que lo más importante es el poder conocer, intercambiar experiencias con personas de otras partes del mundo, poder ver y ser un poco más empáticos con personas que tienen culturas completamente distintas a la tuya. Algo que me di cuenta es que todos tenemos muchas ganas de ayudar", comenta el alumno de noveno semestre.

Para Ferrer, estas experiencias ayudan a romper prejuicios respecto a individuos de lugares lejanos y contextos distintos. Botón de muestra es la amistad que entabló con un joven de Pakistán.

Si bien el trabajo que se celebra en las competencias deportivas es el que han realizado los atletas para llegar ahí, quienes asisten de voluntarios no recorren un camino sencillo.

"Tanto para una Olimpiada como para un Mundial, el proceso de selección por lo general empieza dos años antes de la organización del evento. Por ejemplo, para Río 2016, yo apliqué desde 2014, entre julio y agosto cuando lanzan la convocatoria", recuerda Ferrer, de 23 años.

El trámite incluye llenar un formulario, realizar exámenes de idiomas y entrevistas. Una vez que se confirma la participación, el voluntario debe completar un entrenamiento general en línea y otro presencial, en el que lo instruyen sobre las responsabilidades específicas que le fueron asignadas, justo antes de empezar la contienda.

Aventura en puerta

Además de estar cerca de la gesta deportiva y de sus estrellas, los seleccionados reciben apoyos de los países organizadores.

En Brasil, a Ferrer le dieron su uniforme, una comida al día y una tarjeta para el transporte público. Ahora, Rusia le pagará el hospedaje, una o dos comidas -dependiendo de la duración de la jornada de trabajo-, y el transporte.

Otros gastos generados durante el viaje, incluidos los pasajes aéreos, deben ser cubiertos por los voluntarios.

Ferrer costeó el viaje a Brasil y podrá irse en unos meses al país más extenso del mundo gracias a su...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR