Alejandra Palacios Prieto / Contra las reglas que nos impiden competir

AutorAlejandra Palacios Prieto

Una regulación bien diseñada buscar proteger a la población y está basada en objetivos legítimos de política pública como la salud, la seguridad o la protección del medio ambiente. Sin embargo, también existen normativas que entorpecen o restringen el buen funcionamiento de los mercados. Al lastimar la competencia, frenan el impulso de la actividad productiva e innovadora y encarecen los bienes y servicios que consumimos los mexicanos.

En nuestro País existen incontables regulaciones en todos los órdenes de Gobierno. Algunas de éstas, obsoletas, y otras, en el mejor de los casos, imponen barreras para participar en el mercado, otorgan ventajas a favor de ciertos agentes en detrimento de otros o elevan los costos de participación. En el peor de los casos, no permiten la entrada a nuevos competidores, perpetuando pequeños monopolios.

La Cofece ha detectado varios casos de estos. Por ejemplo, la investigación sobre barreras a la competencia en el transporte de carga en Sinaloa realizada por la Comisión, identificó que la Ley de Tránsito y Transporte y su reglamento, prohíben a los agricultores y constructores de dicho Estado auto proveerse el servicio de transporte para mover sus productos. Conforme a estimaciones de algunos empresarios de éstos sectores, dicha restricción genera sobrecostos de alrededor de 40 por ciento. Asimismo, en consecuencia de la misma regulación, los usuarios de este servicio declararon que prefieren contratar un flete federal de 300 kilómetros para descargar en el puerto de Guaymas, Sonora, en lugar de recorrer apenas 20 kilómetros al puerto de Topolobampo, Sinaloa, pues este último tramo es estatal y la Ley los obliga a contratar el servicio sólo con transportistas locales, quienes aprovechando este proteccionismo, suelen cobrar mayores precios.

En otro caso, el primer proyecto de Norma Oficial Mexicana para el diseño, construcción, operación y mantenimiento de estaciones de servicio de gasolina, replicaba algunos requerimientos para operar una Franquicia Pemex, sobre todo, el relativo a que una gasolinera ubicada en la esquina de un predio urbano debía contar con al menos 400 metros cuadrados de superficie. Una superficie mínima de esa magnitud, que no esté sustentada por razones de...

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