Aleph Cero/ Contracción del tiempo

AutorShahen Hacyan

De vez en cuando me llegan cartas de aficionados a la ciencia que creen haber encontrado una refutación de la teoría de la relatividad de Einstein. Por lo general, se trata de personas con conocimientos básicos de física, a quienes les parece absurdo que el tiempo o el espacio se contraigan, y creen haber descubierto alguna falacia que, desde hace un siglo, habría pasado desapercibida. Es muy comprensible que los principios de esta teoría produzcan desconfianza en quienes se aferran al sentido común, pero es importante aclarar, por una parte, que la naturaleza no tiene por qué ser como a uno le parezca más lógico y, por otra parte, que la relatividad ha sido confirmada una y otra vez con una precisión que ya no deja lugar a grandes dudas.

Tan está confirmada la contracción del tiempo que se tiene que tomar en cuenta en procesos que ya son de uso común, como es la determinación de la posición por medio de lo que ahora se conoce como Sistema de Posicionamiento Global (GPS por sus siglas en inglés). Este sistema, que ya empieza a formar parte de nuestra dosis diaria de tecnología, junto con los teléfonos celulares y otros artefactos electrónicos, permite determinar con una precisión de algunas decenas de metros la posición de un usuario provisto de un emisor apropiado de radio.

El sistema utiliza un conjunto de 24 satélites artificiales provistos de relojes atómicos de gran precisión, colocados en órbitas a unos 20 mil kilómetros de altura. Están distribuidos de tal forma que un usuario, desde cualquier lugar de la superficie terrestre, siempre está en contacto con al menos cuatro de ellos. Debido a que una onda de radio viaja a la velocidad de la luz, que es de unos 300 mil kilómetros por segundo, se puede deducir la distancia entre un emisor de radio y un satélite a partir del tiempo que tarda la señal en recorrer esa distancia.

Determinadas las distancias de un usuario a cuatro puntos distintos en el espacio, sólo falta hacer un poco de trigonometría para encontrar su posición terrestre. Esto lo hace rápidamente una computadora central que envía la información por satélite al interesado.

¿Qué precisión se puede alcanzar con este sistema? La luz recorre una distancia de un metro en un poco más de 3 nanosegundos (un nanosegundo es una milésima de millonésima de segundo). Por lo tanto, para determinar la posición de un radioemisor con una precisión de un metro, los relojes atómicos deben medir el tiempo con una exactitud de nanosegundos. Esto...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR