All City Canvas: Paredes posibles
| Autor | Jesús Pacheco |
Vhils/ Portugal
Vida a la materia
"Cuando estoy tallando un retrato en un muro, estoy haciendo dos cosas de manera simbólica: estoy potenciando esa materia sin vida -el muro en deterioro-, impregnándola con una representación de la vida mediante la yuxtaposición de dos realidades, y estoy destacando el lugar de la gente en el artificial entorno citadino".
De esa manera se refiere a su trabajo como artista urbano uno de los siete creadores extranjeros presentes en All City Canvas. Su seudónimo es Vhils, pero hoy utiliza indistintamente su nombre real: Alexandre Farto, que incluso nombra su sitio web: alexandrefarto.com.
Su técnica se aleja radicalmente de los aerosoles. Los rostros monumentales que ha diseminado por calles de Lisboa, Londres, Berlín, Moscú, Bogotá, Medellín, Cali, Los Ángeles o Shanghai, entre muchas otras ciudades, están labrados, tallados o esculpidos con ácido, cloro, resina, navajas, cinceles o taladro.
Semejante acercamiento a los muros no puede ser descrito sin usar varias palabras incómodas: destrucción, daño, descomposición. Incluso, para referirse a sus métodos, Marc Schiller, integrante del neoyorquino Wooster Collective, dedicado a documentar y analizar el arte urbano mundial, ha escrito: "En las manos de Vhils, el vandalismo se vuelve un acto de creación".
Vhils lo reconoce: dice recurrir a esos métodos y herramientas con las que trabaja con la intención de destruir mientras crea. Con ello, busca subrayar y acentuar el proceso natural de transformación y descomposición de por sí ya presente en la naturaleza de las cosas.
¿Tu obra está hecha para permanecer o la piensas como efímera?
Uno de los principios básicos detrás de mi trabajo es aquel de "nada dura siempre". Esta idea está profundamente arraigada en lo que hago. Obviamente, estoy interesado en tener obra duradera, pero estoy también consciente de que sólo será por tiempo limitado, así que intento trabajar con esa posibilidad, incorporarla en la pieza y dejar que la naturaleza haga su trabajo. Éste es uno de los motivos por los que he estado explorando los contrastes entre lo viejo y lo nuevo, el glamour y el deterioro.
La acción del tiempo sobre la materia es fascinante, no hay escapatoria a eso. Y, en última instancia, todo es efímero.
Creo que la mayoría de los artistas tratan de trabajar contra esa transformación inevitable; el arte, como parte de la historia, está basado en la conservación. Trato de trabajar con la naturaleza e incluir esa posibilidad del cambio con el tiempo. Evidentemente, no es algo que pueda controlar del todo, pero me gusta también lo azaroso de los resultados. La idea es que las piezas estarán cambiando todo el tiempo. La imagen creada hoy no será la misma en 10 años, ni la de la pared ni la de la hoja de metal... Así que si se oxida o cambia, quiero verlo como parte de la pieza, una parte que fue agregada por la naturaleza misma.
¿Qué disfrutas más de hacer obra para exteriores?
Dirigirme a un público mayor, uno que no está formateado para recibir estímulos, eso hace que todo tenga menos restricciones y sea más impulsivo. Además, el hecho de que sea ilegal.
Tu trabajo, como el de los demás artistas presentes en el festival, hace pensar en la relación de la ciudad con quienes la habitan. ¿Cómo describirías tu relación con la ciudad?
Mi relación con el entorno urbano es extraña... De amor/odio. Vistas desde el espacio, las ciudades parecen brotes infecciosos sobre la Tierra, que además se van extendiendo. La ciudad es el virus más grande hecho por el hombre.
¿Cómo te interesaste en utilizar espacios públicos como lienzo para tu arte?
Todo comenzó con graffiti. Yo era muy joven en aquel tiempo, y nunca fue algo en lo que pensara mucho. El graffiti era sólo algo divertido, algo para hacer con los amigos o a solas. Era una buena manera, creativa, de perder el tiempo. Cuando crecí, comencé a pensar más seriamente sobre lo que hacía y me di cuenta de cómo puedes usar los espacios públicos para conseguir que tu trabajo llegue a audiencias más amplias, cómo puedes interactuar con la gente más allá de las restringidas comunidades de graffiteros...
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