Más allá del café
Autor | Nayeli Estrada |
Las barras de café son ya una parte fundamental del estilo de vida contemporáneo. No faltan en ninguna ciudad lugares donde se pueden probar infusiones hechas con granos de casi cualquier origen, tostados de alta calidad y preparadas con métodos diversos, que van de lo clásico a lo moderno.
En medio de este universo, hay barras que apuestan por algo que trasciende su aspecto hedonista para ofrecer café de alta calidad con un plus.
Proyectos que fomentan la inclusión, que luchan contra la corrupción, retoman la mixología o echan mano de los sabores dulces mexicanos, destacan en un mundo acostumbrado al café de excelencia.
CAFEXOLOGÍA
CAFÉ A LA COCTELERA
La carta de este concepto, ubicado al sur de la Ciudad, está vinculada con la experiencia de Braulio Hernández en la mixología ya que, a través de esta barra, se puede probar un umbral más amplio de los terrenos ya explorados por el tradicional carajillo.
"Tenemos 10 opciones de carajillo; nos gusta explorar ingredientes mexicanos, como licor de chile ancho y horchata, y destilados internacionales".
Las propuestas de esta barra no se limitan a las extraordinarias notas gustativas que le dan un giro a este coctel: el servicio en barra y hasta la cristalería especializada empleada en el lugar son detalles a destacar.
Otro aspecto de este proyecto es que no sólo atiende los gustos de los fanáticos del café; también hay opciones para quienes prefieren tomar otras infusiones, como los cocteles Rum Matcha y Tea Tonic.
LOS IMPERDIBLES: Carajillo de Mazapán y Jack and Joe
CAFEXOLOGÍA
Miguel Ángel de Quevedo 353, Romero de Terreros
Ju a Sá, 9:00 a 1:00; Do a Mi, 9:00 a 23:00 horas
TRES 21 ARTE CAFÉ
TAZAS INCLUYENTES
Este local luce en su nombre los cromosomas que determinan que una persona nazca con Síndrome de Down; su carta tiene los estilos de café más clásicos, preparados por integrantes de la Fundación John Langdon Down.
"El café surge para recaudar fondos para la asociación y como un programa de inclusión laboral para los alumnos, porque todos los que trabajan aquí son mayores de 18 años y se les paga semanalmente por las labores que desempeñan como baristas y reposteros", señala Cecilia Purón, representante de desarrollo institucional.
En la decoración del espacio resaltan obras de arte diseñadas por alumnos de la Fundación.
"El concepto está planeado para quitar el estigma de que una persona con Síndrome de Down no puede hacer nada, queremos mostrar que son muy talentosos y tienen una gama de...
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