Amenaza pez león pesca en el Caribe

AutorPedro Diego Tzuc

Corresponsal

MÉRIDA.- El pez león, conocido por representar una amenaza para la biodiversidad marina, al ser venenoso y carnívoro, fue visto en aguas de la Península de Yucatán y en un par de años podría invadir todo el Golfo de México.

La presencia del "Pterois volitans" podría significar además serias pérdidas para las actividades pesqueras y turísticas.

Originario del Pacífico Oeste y Oceanía, el pez llegó en cautiverio a Norteamérica, y desde su liberación al medio natural, de forma accidental o voluntaria, en Florida en 1992, se ha desplazado a Las Carolinas, Connecticut, Bermuda, Las Bahamas, Las Antillas Mayores y Menores, Honduras, Belice y ahora al Caribe Mexicano.

En enero de 2009 se registró el primer avistamiento del pez en Cozumel, y desde entonces se ha extendido por todo el litoral de Quintana Roo. En diciembre pasado se halló un ejemplar en el Arrecife Alacranes, frente a la plataforma costera de Yucatán.

Su aparición en este punto del país representa el primer registro oficial en el Golfo de México que, según expertos, en unos dos años podría estar invadido.

"Sí se prevén impactos económicos de mediana consideración, si no hacemos algo para controlar esta invasión", afirmó el director regional de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) en la Península de Yucatán y el Caribe Mexicano, Alfredo Arellano Guillermo.

Voraz y sin competidor natural, esta especie consume gran variedad de peces, invertebrados, crustáceos, moluscos, incluyendo huevecillos y larvas, lo que implicaría consecuencias para las pesquerías comerciales, desequilibrio para el ecosistema y afectación a la actividad recreativa o turística, especialmente en Quintana Roo, donde los arrecifes son visitados por su diversidad de fauna marina.

"Ya se tuvo el primer registro en las costas de Yucatán, lo que nos está diciendo que se está desplazando hacia el Golfo de México y está invadiendo o va invadirlo en breve plazo", puntualizó Arellano.

-¿Qué qué hay que hacer?-, se le preguntó.

"Hay que matar a la especie. No conocemos un control biológico y no podemos esperar a tener toda una serie de resultados de estudios de investigaciones, porque cuando eso suceda posiblemente ya el impacto económico y ambiental sean de graves consecuencias", advirtió.

Además de desequilibrar al ecosistema, la especie también podría generar impactos serios en la actividad recreativa o turística, especialmente en Quintana Roo, donde los arrecifes son ampliamente...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR