Aprenden y enseñan

AutorTania Romero

En la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) existe la figura de los profesores adjuntos, cuyas funciones varían. Los estudiantes y egresados que siguen este modelo enfrentan un reto en su formación y se actualizan continuamente.

Para Felipe López Veneroni, académico de la carrera de Comunicación en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM, es claro: en algunos grupos es imprescindible contar con uno o varios adjuntos.

Más allá de borrar el pizarrón, pasar lista y cargar los trabajos escolares, asegura, fungen como un puente generacional entre el académico y los estudiantes, contribuyen a hacer más dinámicas las clases y revisar si los materiales o estrategias pedagógicas son los idóneos.

"En un momento mis alumnos tenían la edad de mis hijos, claro, los estudiantes te ven como el 'señor maestro', y no siempre hay confianza y soltura, pero sí le dicen al adjunto 'oye, nos dejaron estas lecturas y no entiendo nada'", afirma el ex director de Radio UNAM.

Otro aspecto que el académico destaca de esta labor es que se forman posibles docentes o estudiantes de posgrado, por lo que es vital couchear a los jóvenes.

"Quien quiere ser adjunto ya tiene una noción de que sí le interesa en algo la academia, muchos quieren seguir con el posgrado y mantener una relación con la vida académica, intelectual", comenta quien es doctorante por la Universidad de Cambridge.

Los tipos de adjunto en la UNAM

Las actividades y características de los adjuntos varían por universidad y carreras, pero tienen coincidencias.

+ El Meritorio debe tener más del 70 por ciento de créditos de licenciatura, con un promedio superior a 8 o, en algunos casos, 8.5.

+ El Remunerado recibe una compensación económica de poco más de 3 mil pesos y prestaciones, como vales o bonos.

+ El de Servicio social es quien, por esta actividad, recibe los créditos necesarios.

En algunos casos también aprovecha su labor para el proceso de titulación.

+ Al término del semestre, deben entregar un reporte sobre su adjuntía, que incluye porcentaje de clases impartidas y las actividades realizadas en el curso.

+ Dependiendo del tamaño del grupo, un profesor puede tener hasta tres adjuntos.

+ Son coordinados por la División de Estudios Profesionales. El maestro sugiere a los candidatos o un alumno se propone.

"Si decimos 'qué malos son los adjuntos, qué flojos o poco claros', es nuestra culpa, pues nosotros los estamos formando".

Felipe López Veneroni, académico de la FCPyS...

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