Aumenta agujero de ozono
| Autor | Alejandro Ramos e Iván Sosa |
En la medida que aumente el adelgazamiento de la capa de ozono en el planeta habrá mayores condiciones para la formación de contaminación atmosférica en la Ciudad de México, planteó el investigador de la Universidad de Trent, en Canadá, Luis Roberto Acosta.
"La destrucción masiva del ozono estratosférico tiene lugar hasta ahora sólo en los polos norte y sur, en tanto, el resto del planeta se mantiene relativamente estable; el peligro potencial se presentará sólo si continúa este proceso en el Siglo 21 y resulta en disminuciones generalizadas, más allá del círculo polar", matizó el especialista.
Y es que a pesar de las medidas instrumentadas por la mayor parte de los países del planeta al seno del Protocolo de Montreal, el agujero de ozono continúa en crecimiento.
"En este año se reportó que la dimensión del fenómeno registró el nivel más grande en la historia, y casi representa la misma extensión del continente africano", comentó Acosta.
Con una dimensión de 28.5 millones de kilómetros cuadrados, esta vez el agujero alcanzó asentamientos humanos, como Ushuaia, Argentina y Punta Arenas, Chile (ciudad de 120 mil habitantes, en donde se aplica un plan de alarma para evitar la exposición al sol entre 11 de la mañana y 4 de la tarde).
"Sobre la Ciudad de México, explicó, hay dos capas de ozono: la natural, situada a 25 kilómetros de altitud, en la estratosfera, al igual que en todo el planeta, y la inducida por el hombre, localizada a nivel de superficie, que se genera por la contaminación atmosférica producida por los procesos de combustión y la quema de hidrocarburos de los sectores del transporte e industrial".
"La capa estratosférica y la que se forma sobre la metrópoli están constituidas por el mismo elemento químico: el ozono, de modo que ambas absorben y retienen la irradiación solar ultravioleta, cumpliendo una función protectora que permite los ciclos de la vida en el planeta.
"La diferencia reside en que el ozono generado por la quema de combustibles en la Ciudad de México es malo, debido a sus efectos oxidantes en los tejidos de personas, plantas y animales, que en el ser humano provocan distintas molestias y consecuencias severas en la salud por exposición crónica, especialmente en vías respiratorias", explicó Acosta.
De acuerdo con las mediciones e investigaciones científicas del especialista, del ozono existente sobre la Ciudad de México de 85 a 90 por ciento reside en la capa protectora estratosférica, y entre 10 y 15 por ciento se origina por la contaminación atmosférica.
El experto, quien introdujo en México el...
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