Con la bendición de Internet

AutorJesús Pacheco

Hace cinco años, Niña Dioz empezó a rapear en bares y locales underground de Monterrey, donde se hacían conciertos de hip-hop con unas cuantas personas. Algunos de sus amigos le permitían intervenir a mitad de sus shows. Tenía una sola canción y era con la que participaba.

Más tarde, hizo los coros a Menuda Coincidencia, otro rapero de Monterrey. Dos años después publicó Marcapasos, en el que se incluía Cuando cuando, una canción que si bien no estaba entre sus favoritas, pronto cobró vida propia.

Fue la única que puso en descarga gratuita en MySpace y se convirtió en un hit que incluso llegó a la radio del DF.

"Según yo, era la menos powerful que tenía, pero fue la que más le gustó a la banda. Para mí, fue una sorpresa. A esa canción no le veía tanto potencial. Luego empezaron a buscarme de revistas, de periódicos...

"Todo estaba pasando aquí en el DF, entonces decidí venirme para acá, empezar a hacerme una gira promocional yo sola".

Como parte de la autopromoción, grabó un primer mixtape, un conjunto de canciones que decidió poner a circular en Internet también en libre descarga.

Entre otros temas, se incluía una versión personalísima de Paper Planes, el tema de M.I.A., cover que pronto fue comentado lo mismo en fiestas que en programas de radio o blogs musicales. En otras canciones le acompañaron Marcela Viejo (de Quiero Club), Erick Santos, MC Luka y Milkman.

Luego de ese mixtape ampliamente descargado, Niña Dioz decidió cerrar 2010 con Chicos, tenis y cachucha, un segundo mixtape para el que contó con colaboraciones en las voces de JRoz, Kid Kimera, Madame Récamier, MC Luka o Li Saumet, de Bomba Estéreo, y con la producción de Lil Go (DF), Chile (Los Ángeles), El Remolón & Villa Diamante (Argentina), Alejandro Rosso (Monterrey) o Frank "El Médico" (Miami).

El segundo mixtape

"Está ahí toda la influencia de la música que escuché durante un año, y una experimentación con diferentes ritmos. Pasamos de un tema muy hip-hop a un latin funk o a una cumbia. Como artista, estoy en constante búsqueda del sonido perfecto, del beat perfecto. Nunca me voy a encasillar con un ritmo. Siempre exploraré nuevos. La búsqueda nunca va a terminar. Para este nuevo mixtape quise ponerme a prueba: sacar un material más fresco, con más colaboraciones, más hot todavía, y lo quise justo antes de que se cumpliera un año de haber sacado el pasado. Todo se fue dando natural, orgánicamente. Chicos, tenis y cachucha lo grabé una parte en el DF y la otra en Los...

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