En busca del voto joven

AutorCarole Simonnet

Sin propuestas políticas novedosas, con estrategias de campañas tradicionales y escasos candidatos jóvenes, los partidos buscan pescar a los votantes de 18 a 29 años, un sector que representa casi un tercio de los potenciales electores.

En los primeros 23 días de campaña, los equipos juveniles de los tres principales candidatos a la Presidencia se han dedicado a acarrear chavos a los mítines, realizar batucadas, distribuir volantes en los cruceros y realizar actividades proselitistas en barrios, playas, prepas y universidades.

Jóvenes con Josefina, el Frente Juvenil Revolucionario del PRI y el Movimiento de Regeneración Nacional Jóvenes y Estudiantes (Morenaje) han desplegado su estrategia principalmente en dos vertientes: una campaña territorial sin candidato y el activismo en las redes sociales.

Este segmento de edad representa 24 millones 513 mil electores, equivalente al 28.96 por ciento de la Lista Nominal de Electores, de los cuales 3.5 millones votarán por primera vez en una elección federal.

Otros 10.5 millones, de entre 20 y 24 años, no han participado aún en unos comicios presidenciales. Los 10.24 millones restantes tienen entre 24 y 29 años.

El voto joven entraña una paradoja: si bien los chicos de 18 y 19 años tienen una participación similar al promedio nacional de 44.6 por ciento, los de 20 a 29 años son los más abstencionistas de todo el padrón junto con las personas mayores a 80 años. Su participación alcanza apenas el 35 por ciento, de acuerdo con los resultados del estudio censal sobre participación ciudadana del IFE relativa a la última elección federal de 2009.

Académicos y representantes de la sociedad civil consideran que los candidatos y sus estructuras juveniles podrían volver de su pesca con las redes vacías porque repiten el mismo lenguaje añejo de siempre, aunque usen nuevas herramientas como internet.

Propuestas huecas

A 70 días de la jornada electoral, los candidatos han ofrecido becas y computadoras así como facilitar el acceso de los jóvenes a prepas, universidades y al mercado laboral.

La propuesta educativa anunciada por Vázquez Mota incluye crear un fondo de capital semilla por 500 millones de pesos para apoyar proyectos de jóvenes emprendedores; entregar 16 millones de becas en su sexenio (el doble de las otorgadas en el actual); cumplir con el 100 por ciento de demanda en bachillerato; instaurar 30 mil escuelas con horario extendido y fundar 350 clubes de afinidad de estudiantes en instituciones de educación superior.

En el rubro de la vivienda, la panista se pronunció a favor de otorgar subsidios para el pago de enganches de créditos a matrimonios jóvenes.

El candidato de la alianza Compromiso por México (PRI-PVEM), Enrique Peña Nieto, ha firmado un solo compromiso relacionado con los jóvenes: alcanzar una cobertura del 100 por ciento en educación media superior en 6 años.

En tanto, el candidato de la coalición Movimiento Progresista (PRD, PT y Movimiento Ciudadano), Andrés Manuel López Obrador, prometió alcanzar el 100 por ciento de inscripciones en las universidades públicas, crear 150 nuevas, impulsar escuelas de tiempo completo, entregar becas y proveer de computadoras a bajo precio a estudiantes de educación media superior.

En sus plataformas, los partidos dedican capítulos específicos a la juventud pero sus propuestas sobre empleo, seguridad, vivienda y salud son difícilmente medibles.

PRI y PRD proponen aprobar una ley general de la juventud para garantizar, al menos en el papel, el acceso a la educación, la salud, el trabajo, la vivienda y la participación política de los jóvenes.

Entre las ofertas más concretas, el PAN contempla transformar el servicio militar obligatorio para que quienes lo deseen opten por un servicio social comunitario. El PRI precisa que establecerá programas de acceso a créditos accesibles para lo compra de la primera vivienda de los jóvenes. Y el PRD anuncia campañas de información más agresivas para prevenir embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual.

Erick Fernández Saldaña, académico del Departamento de Comunicación de la Universidad Iberoamericana, considera que los candidatos y sus partidos han enunciado hasta el momento las mismas propuestas genéricas en materia de educación y empleo, por lo que la penetración entre la juventud parece ser mínima.

"Estamos hablando simplemente de ideas que no aterrizan, en términos del marketing político es muy bueno decir firmo compromisos o que vas a atender tres temas y a partir de estos tres desarrollar toda una estrategia de campaña, pero los jóvenes finalmente buscan resultados en el corto plazo", señala.

Advierte que estudios recientes como la Encuesta Nacional Gobierno, Sociedad y Política de Gabinete de Comunicación Estratégica que se hizo en colaboración con la Universidad Iberoamericana, demuestran que los jóvenes no se sienten identificados con ninguna opción política.

Los mensajes que los candidatos en general hacen para ellos no tienen ningún tipo de piedra de toque que les pueda...

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