Empresa/ Caja de Pandora

AutorAlberto Barranco Chavarría

La Caja de Pandora hará saltar desde inauditos episodios de simulación, hasta derrama sin fin de créditos relacionados, es decir autopréstamos, entregados la mayoría de ellos sin garantías específicas de por medio.

Así el otorgamiento de créditos simulados a cambio de jugosas comisiones, cuyo destino final era el bolsillo del ex presidente de la intermediaria, Carlos Cabal Peniche; así la utilización de hombres y nombres de paja como supuestos propietarios de hoteles adquiridos al 100 por ciento con dinero del banco; así la colosal farsa que resultó la compra de la cadena hotelera Camino Real, a cuyo frente aparecía un testaferro del propio ex banquero...

Como recordará usted el conflicto, a cuya vera se planteó la acusación contra el Presidente Ernesto Zedillo, las Secretarías de Hacienda y Gobernación y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, se inicio al cerrársele las puertas de la intermediaria a la auditoría del canadiense Michael Mackey... en la evidente intención de impedir el acceso a los libros de los fideicomisos donde se habían depositado cuantiosos donativos al partido oficial...

De acuerdo a los datos conocidos, existían cuatro de ellos: los marcados con los números 2929-4 (Comité Ejecutivo Nacional del PRI-Banco Unión); 2739-9 (Comité Estatal del PRI-Banco Unión); 2939-1 (Comité Estatal del PRI-BCH, es decir la razón social original de la intermediaria a su privatización), y 3110-8 (Comité Directivo Estatal del PRI-Banco Unión).

Los recursos, presuntamente 20 millones de dólares, se habrían canalizado a financiar dos campañas presidenciales: la del malogrado Luis Donaldo Colosio y la de Ernesto Zedillo, a más de la del Gobernador de Tabasco, Roberto Madrazo Pintado.

La explicación de la Secretaría de Hacienda al reclamo de los Diputados fue que "el marco legal vigente establece claramente el derecho de los particulares y la correspondiente obligación de las autoridades para con el sector bancario y el secreto fiduciario".

Más allá, la dependencia encabezada por José Angel Gurría hablaba de que la pretensión del auditor del país de la hoja de arce para que se le proporcionara un listado de todos los fideicomisos del banco, resultaba "legalmente improcedente", dado que no se ubica en los términos dispuestos del artículo séptimo transitorio de la Ley de Protección del Ahorro Bancario, y "excede el alcance del Decreto por el que se expide dicha ley".

La paradoja del caso es que el séptimo transitorio de referencia preveía...

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