De niño las canicas, de adulto Las Vegas

AutorMelina Gil

Corresponsal

GUADALAJARA.- Las canicas de niño, el golf de adulto, las visitas a Las Vegas y luego... comenzar a perder lo que ni siquiera tenía.

"A mí me afectó más por el lado de las apuestas a deportes, el "buck". Empecé a jugar diario. Si no había béisbol, había fútbol americano, soccer. Al principio fue vía telefónica y luego en una página de Internet, con todos los códigos de seguridad y los deportes del día", recuerda Joaquín. Así comenzó todo, hace más de seis años.

"En un partido de fútbol, estaba con un amigo y él había apostado. 'Qué facilito', pensé e hice mi primera apuesta de 100 dólares a que ganaba el Real Madrid y sí, gané. Al rato, ya estaba apostando 5 mil dólares".

Joaquín quedó envuelto en el mundo de las apuestas. Comenzó a tener problemas con su socio en la empresa de bienes raíces y prefirió venderla. Ya no le interesaba.

"Lo vi (el juego) como algo sustentable, me manipulé y dije 'de esto puedo vivir, me voy a hacer rico de aquí'. Pero llegué a ganar mucho dinero, tenía mucho dinero y no hacía nada con él, no cambiaba de carro, ni me compraba un reloj, podía tener un millón de pesos en mi cuenta y no lo gastaba", relata.

"(En el juego) todo es progresivo. Necesitas perder...

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