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Cascadas petrificadas

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Vincent
AutorAlicia Boy

Estar de frente a las cascadas petrificadas de Hierve el Agua convierte el moderno hombre del Siglo 20 en el eterno ser sorprendido ante las creaciones de la naturaleza.

El paraje, una más de las maravillas que ofrece Oaxaca al mundo, se encuentra a unas dos horas de la capital del estado y, para llegar, se debe transitar por un largo camino de terracería que conduce a la cima de un cerro en donde, por supuesto, ya se han asentado puestos de recuerdos, comida chatarra y guisos locales.

Los puestos, en una construcción de madera con techo de lámina, pertenecen a los habitantes de la ranchería Roeguía, un poblado de alrededor de mil habitantes dedicados principalmente a la agricultura y a la cría de ganado y aves de corral y quienes cuentan ya con su propio Turist Yuíu, para dar albergue a sus visitantes.

Desde ese punto es necesario descender

unos cuantos metros por un camino pedregoso, en el que se debe andar con cuidado para evitar torceduras, lo cual es tan común que quienes atienden los puestos recomiendan enseguida a "la que sabe sobar".

En la plataforma donde nace el manantial se puede ver cómo se acumuló el carbonato de calcio del que está compuesto el agua. A la naturaleza le ha llevado alrededor de cinco mil años crear estas brillantes cascadas, algunas con las manchas de óxido del tiempo y otras, las más nuevas, de un mineral claro que se ilumina con el reflejo del sol.

Una de las formaciones más antiguas ha tomado un tono grisáceo obscuro que, sin embargo, impresiona al espectador. Es ahí donde han aprovechado para formar una alberca natural, cuyo único inconveniente es la saturación por visitantes durante los fines de semana, lo que convierte a Hierve el Agua en un balneario con aguas que algunos consideran curativas. Esa es una razón para llegar a las cascadas lo más temprano posible.

Del ojo de agua, de donde surge el manantial, nace un borbotón que da la impresión de estar en plena ebullición, razón por la cual se nombró a este sitio Hierve el Agua. Y, sin embargo, en realidad se forma exclusivamente por la presión a la que sale el agua, cuya temperatura es ligeramente superior a la del ambiente, fluctuando entre los 22 y 25 grados centígrados.

Sitio Ceremonial

A partir de este punto se pueden ver los canales de riego construidos hace más de 2 mil 500...

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