Chatarras: rumbo al reciclaje
| Autor | Tatiana Adalid |
En lugar de entrar al mercado negro, ingresaron al mercado verde. Los 402 vehículos chatarra que abarrotaban los corralones de la Procuraduría General de Justicia del DF se integraron a procesos de reciclaje de basura.
La condición que puso la dependencia para entregar los autos es que las unidades fueran destruidas de forma completa para evitar que algunas de sus piezas entraran al mercado negro.
Y así sucedió. Los vehículos desechados por la Procuraduría, que en su mayoría estuvieron envueltos en algún ilícito, ingresan al mercado denominado de las tres R, es decir, al reciclaje.
Actualmente, según datos de la propia empresa que adquirió los vehículos, CFF Recycling, 75 por ciento de los materiales de un vehículo puede ser reutilizado. El resto terminará en rellenos sanitarios o basureros.
Sin embargo, se espera que el porcentaje de material reutilizable en cada unidad aumente en los próximos años.
RIP Para Automóviles
La última vez que se vio el Cutlass blanco completo fue cuando una gran pinza mecánica lo tomó para echarlo en la banda que lo llevaría a la trituradora: minutos después el automóvil se convirtió en pedacería que salía por tres distintos tubos...
Este fue el destino de los vehículos vendidos por la PGJ del DF a la compañía recicladora, quien pagó alrededor de mil 500 pesos por auto para después destruirlos.
En un predio en Ecatepec, se puede ver una máquina en color azul que tritura a los automóviles y clasifica los desperdicios en tres categorías: metales ferrosos, metales no ferrosos (aluminio y cobre, entre los más comunes) y materiales no metálicos.
Los materiales de cada una de estas categorías, con excepción de los no metálicos que provienen básicamente del interior del vehículo, se venden por separado a las compañías fundidoras.
El fierro con que está construido el automóvil, termina en masas pequeñas, sin forma y libres de pintura, lo que, según Alberto Moncada, encargado de la sección de metales no ferrosos de la empresa, convierte al proceso en "ecológico".
Para Moncada, al quitar la pintura se evita que cuando se queman se liberen tóxicos a la atmósfera.
Sin embargo, al llegar a la empresa la impresión es otra. Ubicada en una de las muchas Avenida de las Torres que existen en este municipio mexiquense, lo primero que se ve son las chimeneas de la trituradora que arrojan humo negro.
Junto a la máquina, que opera de forma automática y que reduce la labor de los empleados a eliminar la basura no desintegrada, están...
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