Cierre masivo

AutorIsrael Sánchez

"Ahi, ahí. No, más para atrás. Tómame otra, pero acá", van enunciando miles de personas congregadas en el Museo Jumex.

Esa y otras locuciones acompañan una dinámica común en la última jornada -y, prácticamente, durante todo el periodo de exhibición- de Apariencia desnuda: el deseo y el objeto en la obra de Marcel Duchamp y Jeff Koons, muestra que ayer cerró.

"Creo que el hecho de venir únicamente a una exposición de tal magnitud por la foto selfie para subirla a Instagram y pensar que somos muy cool porque estamos aquí, no me encanta, pero bueno, finalmente cada quien es libre", opina para este diario la investigadora Liliana Ceja.

"A mí me parece mucho más interesante poder apreciar la obra, la hechura, la manufactura, el poder analizar cómo justo se van conectando estos dos artistas a través de sus obras".

A cuatro meses de su apertura, este domingo fue la última oportunidad para muchos de atestiguar dicho diálogo entre dos maestros del ready-made en torno al deseo, el consumo, el objeto, la infancia, la tecnología y el erotismo. Pero, sobre todo, de lograr varias capturas que probaran que se atestiguó.

"La gente muchas veces sólo viene a tomarse fotografías con la obra que está, pero también (es interesante) cómo la obra como tal interactúa con el público, que muchas veces antes eso no se veía. Es otro nivel de interacción", estima Fernanda Pérez, diseñadora gráfica.

Hacia el mediodía, la fila de ingreso bajo la monumental Bailarina sentada es modesta, pero en las salas del recinto el paso es atropellado. Demasiadas personas, niños, adultos...

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