'Ciudadanizan' acceso espacial
| Autor | Israel Sánchez |
El 4 de diciembre de 2015, desde el techo del Centro Expo Guadalajara, sede de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, despegó el primer nanosatélite artístico mexicano en cuya misión participaron creadores, filósofos, científicos, ingenieros y hasta abogados.
Por un error, el objeto voló brevemente y se desplomó sin poder ser recuperado. Sin embargo, la misión fue considerada exitosa y un mensaje fue enviado: el espacio es de los ciudadanos.
Así lo narra el libro Ulises I, una misión de arte al espacio por el Colectivo Espacial Mexicano, diario de viaje que será presentado el próximo 20 de marzo por el director del proyecto, Juan José Díaz Infante, quien plasmó la odisea de construir y lanzar el nanosatélite homónimo al héroe homérico.
"Yo soy un acelerador mental y la palabra Colectivo Espacial Mexicano es la autoría de esto", dice sobre el grupo interdisciplinario que dotó al Ulises I de arte y tecnología para emprender el vuelo suborbital, ejerciendo así el derecho ciudadano de acceso al espacio.
Entre ellos están el compositor Arturo Márquez, el filósofo y poeta Fernando Castro, el artista Omar Gasca, la escritora Teresa Bordona, el artista sonoro Hugo Solís, además de un equipo de científicos del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE), ingenieros del taller de robótica del Cenart, productores, abogados, gestores investigadores, asesores y contratistas de varias agencias extranjeras.
"Es una línea muy tenue entre arte contemporáneo (y) ciencia", dice el artista multidisciplinario, fotógrafo y poeta, quien en 2010, tras leer sobre satélites caseros en una revista, decidió lanzar el suyo, fungiendo desde entonces como el director de orquesta detrás de esta ópera espacial.
Díaz Infante y el Colectivo enfrentaron desde críticas de que su nanosatélite, cargado de poesía y música, era una ofensa para la comunidad científico-espacial hasta problemas de financiación y "timidez administrativa" de distintas instancias.
"Este libro trata de ser una comedia.
"Al final del día no te lo puedes tomar en serio porque lloraríamos y habría que incitar a una revolución", afirma el también autor de más de 25 libros.
Y es que el texto brinda un amplio testimonio ilustrado sobre aquellos que ofrecieron apoyo y luego lo...
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