La clave está en el ahorro
| Autor | Noel GarcÃa |
MONTERREY.- Si de por sí los altos costos en la adquisición de tecnologías de energías renovables, como paneles fotosensibles o aerogeneradores, impiden que su adopción sea fácil, en estos tiempos de recesión económica la escasez de liquidez en las empresas y las restricciones en el crédito agravan la situación.
Por ello, especialistas coinciden en que ante la necesidad de reducir gastos en energéticos y la dificultad de establecer sistemas de producción de energías renovables, la estrategia es un régimen de ahorro en el consumo.
Varias dependencias gubernamentales ofrecen asesorías y foros especializados en el tema del ahorro, los cuales han sido efectivos en lograr descuentos en las facturas de clientes industriales.
La mayoría de estas medidas implican inversiones, sin embargo, en muchos casos éstas se recuperan a los pocos meses a través del ahorro.
Una de las paraestatales que brindan orientación para el ahorro de energía es la Comisión Federal de Electricidad, a través del programa CFEctiva empresarial.
Este programa se lleva a cabo, a través de un ejecutivo de cuenta que designa la CFE para que visite las instalaciones de las empresas, analice los requerimientos energéticos de su producción, consumos y facturas, y calcule los ahorros que podrían obtenerse al modificar algunos hábitos de demanda, como horarios de producción, reemplazo de algunos equipos y adición de dispositivos que optimizan el uso de electricidad.
Tal es el caso de la empresa Usem de México -dedicada a la fabricación de motores eléctricos para transporte, ventilación y distribución de agua - que a partir de la implementación de ciertas medidas y equipos ha conseguido un ahorro de 213 mil 625 dólares anuales en sus facturas de electricidad.
Demófilo Maldonado, gerente de Manufactura en la planta de Usem, explicó que fueron orientados desde 2006 por un ejecutivo de cuenta, y por sesiones informativas de la CFE, para conectar un programador en el sistema de aire acondicionado, tanto de las oficinas como de piso.
"Inclusive ya le hicimos una programación anual al aire acondicionado; se definió a qué hora se va a prender, a qué hora se va a apagar, y nada más esto va a tener un beneficio de 59 mil 356 dólares al año. Es un pequeño display de todas las manejadoras que controla".
En cuanto a iluminación también se hicieron cambios, reemplazaron las lámparas fluorescentes de las oficinas, pasando de 38 watts de 4 barras, a lámparas de alta reflejancia, de 32 watts de 2...
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