CNTE: resistencia sin fin
| Autor | Andro Aguilar |
Media hora antes de que la Policía Federal se abriera paso con gases lacrimógenos y chorros de agua en el plantón que tenía la CNTE instalado en el Zócalo capitalino, el pasado 13 de septiembre, un maestro oaxaqueño de menos de 40 años que ya cargaba su mochila sobre la espalda justificaba su repliegue: "es un retiro táctico, vamos a reorganizarnos".
Dos semanas después, la resistencia magisterial se materializa en la Plaza de la República, con el Monumento a la Revolución como testigo.
Cientos de carpas de distintos colores hechas con plástico y lona se extienden sobre las cinco hectáreas que conforman la explanada.
La Avenida de la República, desde Paseo de la Reforma, es un laberinto de autobuses que ofrecen salidas a Oaxaca y Veracruz.
Las astas de las 30 banderas nacionales alineadas sobre esa avenida y las palmeras sembradas a un lado sujetan las tiendas de campaña de los profesores veracruzanos.
Al borde de la plaza, el paso peatonal se estrecha.
Del lado izquierdo está el edificio del ISSSTE, en cuyos primeros escalones también hay tiendas de campaña; del lado derecho, un restaurante también rodeado, y en medio, varias carpas que de tan amontonadas han hecho necesario improvisar letreros para indicar dónde no hay paso.
A la hora de la comida, el campamento huele a carbón que arde en los anafres, caldillo de jitomate que ya soltó el hervor, pollo en salsa verde, mole, arroz, frijoles.
A unos metros del ISSSTE está la mesa central de la sección 22 de Oaxaca y su comisión jurídica. Un metro atrás, el servicio médico. Del lado derecho, un puesto de películas y CDs que aporta el sound track a la resistencia: Víctor Jara, Silvio Rodríguez, Carlos Milanés o corridos revolucionarios.
Así es la tercera sede del campamento errante de la CNTE. Desde este sitio, la Coordinadora afina la tercera etapa de su estrategia en contra de la reforma educativa, una reforma constitucional y a leyes secundarias ya aprobada en el Congreso y publicada en el Diario Oficial.
Una reforma ya consumada que, sin embargo, los maestros seguirán resistiendo con paros cívicos, marchas, tomas de embajadas. Algunos maestros hablan de que la siguiente etapa es conformar un frente único popular a nivel nacional. Otros esperan el resultado de las negociaciones que sus líderes mantienen con la Secretaría de Gobernación.
Lo tangible es que, cuando algunos pensaban que el desalojo del viernes 13 pondría punto final a los bloqueos, las marchas y las tomas de instalaciones que...
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