Colaborador Invitado / Jaime Zabludovsky: Comer, beber y decidir

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Recientemente, se ha desarrollado un intenso e interesante debate sobre el etiquetado nutrimental de alimentos y bebidas no alcohólicas preenvasados. Se trata de un asunto de relevancia, puesto que todos somos consumidores, y lo que está de por medio son nuestros derechos a la información, a la alimentación y, por lo tanto, a la salud.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) el etiquetado nutrimental, cuando se ubica al frente del envase, es una herramienta efectiva para que las personas lleven a cabo selecciones informadas y conformen una dieta correcta y, con ello, contribuir a la prevención y disminución del sobrepeso, la obesidad y enfermedades crónicas asociadas.

El sector privado mexicano está totalmente convencido de los beneficios de contar con un etiquetado frontal nutrimental eficiente. Coincidimos con el presidente Andrés Manuel López Obrador, en que para brindar a los consumidores información más clara, objetiva y veraz, se debe contar con el apoyo de la agroindustria alimentaria.

No podría ser de otra manera. La OMS recomienda que la mejor práctica en el diseño del etiquetado frontal nutrimental debe ser resultado de un proceso de colaboración liderado por el gobierno, con la participación plena y abierta de todos los involucrados, para que éste sea factible para la industria, confiable para los consumidores y soportado con sustento científico.

En este tenor, y con el ánimo de construir un diálogo propositivo, consideramos que para que el etiquetado frontal nutrimental sea transparente, claro, veraz y útil, debe cumplir con los siguientes principios:

  1. Ser informativo, al describir con precisión al alimento y bebida no alcohólica tal y como es;

  2. Advertir sobre los contenidos calorías, azúcares, grasas saturadas y sodio;

  3. Ser universal, para todos los alimentos y bebidas no alcohólicas preenvasados, sin excepción, para que se tenga toda la información necesaria;

  4. Estar estandarizado, para acceder a la misma información y en el mismo orden y formato;

  5. Ser declarado, siempre, por porción, haciendo tangible lo que se consume, además de estimular la reducción de la...

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