Concesionar al NAIM, centro del debate
| Autor | REFORMA//Staff |
El debate en torno al Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) tomó durante las campañas electorales un nuevo giro, ya que ahora se analiza la viabilidad de concesionarlo.
El candidato a la presidencia y puntero en las encuestas, Andrés Manuel López Obrador, ha señalado que de ganar las elecciones, ya no cancelaría la construcción del proyecto, como había afirmado antes.
Sin embargo, para continuar con su desarrollo, dice que estaría dispuesto a concesionar la obra para que sea un privado quien invierta y no el Gobierno.
Aunque bajo este modelo operan 39 aeropuertos, a cargo de tres grupos aeroportuarios, expertos y autoridades señalan que lo ideal es que se asigne el NAIM hasta que entre en operaciones, pues hacerlo antes, implicaría una menor rentabilidad para el Gobierno mexicano.
Si se concesiona a un privado, tiene que hacerse con equilibrio y no sólo con un fin cortoplacista, sostiene Filipe Pereira, director regional de la Asociación del Transporte Aéreo Internacional (IATA, por sus siglas en inglés).
Además, aunque las autoridades no se oponen a esto, consideran que debe ejecutarse cuando el Nuevo Aeropuerto ya esté en operaciones.
Sin embargo,dijo, si se concesiona el proyecto, una alternativa sería que el Gobierno establezca cuotas fijas por operar el aeródromo, con el fin de que el concesionario no sólo busque las ganancias, sino una buena gestión.
Esta opción implicaría que el rendimiento anual para el concesionario esté determinado por el Gobierno y que, si opera el lugar de una forma óptima, le otorgue bonos por ello, explicó.
Pereira dijo que la intención con la alternativa de concesión que sugiere es que el potencial concesionario busque una buena gestión del aeropuerto y que no sólo vaya tras los rendimientos.
"Tenemos ejemplos en todo el mundo, que se han concesionado aeropuertos y que ha disminuido la calidad del servicio, que no ha incrementado la calidad del servicio, que no ha incrementado la capacidad del aeropuerto", comentó.
Para Yuriria Mascott, subsecretaría de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) lo deseable es que el Gobierno mantenga el control en el proyecto, ya que también se trata de una obra de impacto social en el que se requieren trabajos de conectividad y eso sólo se puede hacer si el Estado está a cargo.
La funcionaria reconoció que el modelo de concesión es factible a futuro, pero enfatizó que durante la construcción, lo ideal es que el Gobierno no lo concesione.
Resaltó que la...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba