Consideran 'caótica' distribución del agua
| Autor | Daniel Millán |
Los organismos operadores de agua del país se encuentran en una situación "caótica", por lo que su funcionamiento, en las actuales condiciones, no es sostenible en el mediano plazo, advierte la Comisión Federal de Mejoras Regulatorias (Cofemer), dependiente de la Secretaría de Economía.
La cobertura del servicio es desigual; las tarifas son inadecuadas debido a que los funcionarios no quieren asumir costos políticos, sólo una cuarta parte del agua suministrada se potabiliza, y sólo una quinta parte del líquido utilizado es tratado, señala el organismo.
Además, apunta, las leyes actuales no promueven el ahorro de agua.
Se trata de algunas de las conclusiones de un análisis sobre el sector realizado por la Cofemer, y difundido a casi nueve meses de haber iniciado esta administración, que ha declarado al líquido como un asunto de seguridad nacional.
De acuerdo con el estudio, el origen del problema radica en la decisión de los servidores públicos responsables del sector (normalmente funcionarios municipales que están tres años en el cargo) de no cobrar tarifas adecuadas, porque al hacerlo, sufrirían un costo político, y los resultados los "cosecharían" no ellos sino sus sucesores.
Servicios de baja calidad
"En el servicio público de agua potable, drenaje, alcantarillado y saneamiento, la calidad del servicio (continuidad, presión, sanidad) es frecuentemente baja", indica la Cofemer.
El organismo estima que en México las pérdidas por fugas rondan el 40 por ciento, cuando a nivel internacional se pueden alcanzar -con las mejores prácticas- mermas de apenas el 20 por ciento.
En el documento, la Cofemer recuerda que en 1994 el índice de continuidad -es decir, de tomas que cuentan con suministro constante de agua- era del 67 por ciento. La dependencia dice no poder precisar el actual índice de continuidad pero advierte: "Se sabe que al menos en la Ciudad de México, la periferia sufre de interrupciones continuas (tandeos) que se agravarán en los años siguientes".
El texto resalta el contraste en la cobertura del servicio. Para 1999, indica, el 95 por ciento de los hogares urbanos tenía agua potable, por 65 por ciento de los ubicados en la zona rural.
En alcantarillado la diferencia resultaba aún mayor: 87 por ciento en el caso de los urbanos, por sólo un 33 por ciento en el caso de los rurales.
"Destaca el hecho de que estados como Guerrero y Oaxaca presentan los más bajos porcentajes de cobertura de ambos servicios y se advierte que en ambos...
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