COORDENADAS / Lo que se evaluará en el caso Banamex

AutorEnrique Quintana

Hay argumentos que parecen sólidos, a favor y en contra de la venta de Banamex, por lo que al final de cuentas, será el criterio del Gobierno el que tenga que decidir si obliga a Citigroup a esta venta.

Le aseguro que en el análisis que están efectuando Hacienda, Banco de México y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores no pesa exclusivamente la implicación legal, sino que al final la decisión será influida fuertemente por motivos económicos.

La redacción del artículo 13 de la Ley de Instituciones de Crédito es tan ambigua que puede servir para justificar que Citi se quede con Banamex o para sustentar el argumento de la venta obligada.

Dice el texto: "No podrán participar en forma alguna en el capital de las instituciones de banca múltiple personas morales extranjeras que ejerzan funciones de autoridad".

Respecto a la prohibición, se puede argumentar -como muchos lo han hecho- que si el Gobierno de Estados Unidos es el principal accionista individual de Citigroup, si va a tener posibilidades de poner consejeros, si va a influir en la conducción general del grupo, puede asumirse como el propietario.

Y si es el propietario, entonces, indirectamente, una persona moral con funciones de autoridad participaría en el capital de un banco en México, lo que sería violatorio de la ley.

Pero, de otra parte, Citi puede argumentar que como institución bancaria no forma parte del Gobierno de EU y menos aún si las acciones comunes adquiridas por el Gobierno de EU se colocan en un fideicomiso que permita separar la operación de Citi de la autoridad del Gobierno norteamericano.

El otro argumento esgrimido el viernes pasado por Banamex también es plausible. Se trata del hecho de que el Tratado de Libre Comercio permite que cualquiera de los estados firmantes "adopte o mantenga medidas razonables por motivos prudenciales", como las que está instrumentando el Gobierno de EU al intervenir en Citi.

Y se argumenta que el Tratado internacional está por arriba de una ley secundaria y sólo queda subsumido a la Constitución.

Sé que parece ambiguo este conjunto de argumentos y así es.

Por ello creo que la decisión de autorizar o no la permanencia de Banamex va a depender de si Citi está en disposición de venderlo y si hay compradores potenciales.

Un escenario es que haya inversionistas mexicanos interesados. No es imposible, pero hasta ahora nadie ha levantado públicamente la mano.

Sin embargo, vería más factible que el banco brasileño Itau decidiera hacer una...

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