De todo corazón
| Autor | La Tía Remedios |
Cara demostración de 'hombría'
Felicidades por tu sección, me encanta y diario compro el periódico para verla. Tengo un problema; siempre he estado enamorado de mi cuñada, pero la respeté pese a que ella, cuando era soltera, a veces se me insinuaba. Hace seis meses tuvo un bebé, y no sabe quién es el papá. Hace poco fui a visitarla y estaba dándole pecho al bebé y le dije que ya me iba, pero que se me desnuda y que se me ofrece. Dije que no, que quiero a su hermana. A partir de ahí, ella empezó a decir que soy gay porque no me la quise echar y cosas así. Entonces, la otra vez que fue a la casa se metió a bañar y yo no me aguanté las ganas y tuvimos relaciones hasta por donde no. Ahora me dijo que tiene un retraso en su regla y no sé qué hacer para solucionar este problema, por eso requiero uno de tus sabios consejos para salir avante de la situación. Gracias.
Topi Loco
Querido Topi Loco, ya saciaste un deseo que llevabas años incubando por la hermana de tu esposa, y tan a lo "güey" que ni siquiera tuviste la precaución de ponerte un condón. Claro, el reto era probarle que no eres gay ¿verdad? Esperemos que la única consecuencia de tu demostración de "no ser gay" sea el bebé que posiblemente viene en camino y no alguna infección de transmisión sexual, considerando que tu cuñada ni enterada está de quién es el padre de su hijo, lo cual significa que ha tenido relaciones sexuales con más de un hombre y nunca usó protección. ¿Qué hacer ahora?, decidir qué harán con el posible embarazo. Pueden optar por un aborto, aunque eso no borrará que los dos sepan para siempre que se encamaron y se embarazaron; pero, ¿qué ocurrirá si ella no quiere hacerlo y le dice a tu esposa que espera un hijo tuyo? Tal vez sea el fin de tu matrimonio o puede ser que te organices para que las dos hermanas te compartan y mantengas a todos los hijos que en el futuro tenga tu cuñada, porque tú mismo dices que no tiene límites. Los encames a lo "caliente", por no decirlo de otra manera, siempre tendrán consecuencias muy complicadas. Así que ahora no te queda más que enfrentar el costo de tu calentura, no hay más. Pero alégrate de algo, ya te demostraste a ti mismo que no eres gay, y, agrego, tampoco hombre, porque se necesita tenerlos mucho mejor puestos para decir que no a un sexo que sólo traerá dolores de cabeza. ¿Qué te queda? Enfrentar tu posible paternidad y la terminación de tu matrimonio, si tu esposa se da cuenta del embarazo y no desea compartirte con su hermana.
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