Corrupción en Pemex gana a superintendente
| Autor | Sandra Isabel Jiménez |
Veracruz / Veracruz
En 1999, David Ortega Vega, ex superintendente general de Distrito C de la Terminal de Administración y Distribución de Pemex, en Villahermosa, Tabasco, detectó una serie de irregularidades en contra de la paraestatal, presentó la denuncia ante la Controlaría interna pero a cambio recibió su liquidación.
Del 3 de febrero al 28 de abril de ese año, descubrió que altos funcionarios autorizaban obras inconclusas con pagos anticipados, constructoras que recibían adjudicaciones directas sin participar en concursos de licitación y casos de nepotismo.
Hasta la fecha, sus denuncias aún no proceden. Incluso, la Comisión Nacional de Derechos Humanos cerró su caso sobre la queja que presentó cuando, al ser separado de su cargo, no recibió a tiempo la protección que establece el artículo 50 de la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos.
"Ni Pemex, ni la contraloría interna, ni la Secodam me han hecho caso hasta ahora. Faltan todavía muchos actos de corrupción por castigar", señaló.
El ex funcionario acusó ante la Contraloría a quienes primero recibieron los reportes de las irregularidades, sus superiores jerárquicos: Gustavo Adolfo Pastrana Angeles, gerente comercial de la Zona Sur; Gustavo Vallejo de la Garza, subgerente de Operación y Mantenimiento; Francisco Morales Ramírez, subgerente de Protección Ambiental; y el jefe de la Unidad de Administración, Fernando Ugalde Uribe.
"Ugalde Uribe está ahora fuera de Pemex, por renuncia, aparentemente se vio obligado a presentarla cuando lo descubrieron en actos de corrupción, como falsificar facturas, pero no procedieron en su contra y prefirieron nada más dejarlo ir, a lo mejor por la protección que le dieron", refirió.
"Yo les reporte todas estas irregularidades y nunca quisieron hacer nada al respecto. Al contrario, me sustituyeron inmediatamente cuando ya no pudieron controlar mis comunicados vía correo electrónico, vía documentos", expresó el ex funcionario.
El inicio del conflicto
Los conflictos para Ortega Vega comenzaron cuando, después de asumir el cargo, detectó que la construcción de muretes interiores con drenajes dependientes para la Terminal de Administración y Distribución (TAD) de Villahermosa, estaba incompleta y presentaba problemas.
Además, encontró que la constructora responsable del trabajo, "Sistemas Control y Fuerza", había recibido un pago anticipado de 721 mil 154 pesos con 85 centavos -cantidad correspondiente sólo a la tercera parte de la obra- antes de que concluyera los trabajos correspondientes, es decir, el 20 de diciembre de 1998.
El 25 de febrero levantó el "acta constancia" TAD-VH-AA01/99, en la cual los representantes de la compañía aceptaban las deficiencias que presentaba la obra e incluso se comprometían a regresar el dinero correspondiente a los trabajos no realizados. Sin embargo, en mayo del 99, la obra continuaba.
Por este caso particular, Ortega Vega presentó una denuncia ante la Contraloría interna de Pemex Refinación, la cual quedó radicada finalmente en la "Unidad de Quejas y Denuncias y Atención Ciudadana" de la paraestatal bajo el expediente PE.048/99.
En su queja, el ex funcionario presentó un "Análisis selectivo de contratos de las compañías constructoras", correspondiente a los años de 1997 a 1999, en donde menciona a siete empresas que son favorecidas en la entrega de las obras por invitación o adjudicación directa, y que además no participan en los...
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