Corrupción: Sello del sexenio

AutorRolando Herrera

En marzo de 2012, al iniciar su campaña por la Presidencia de la República, Enrique Peña firmó sus primeros tres compromisos, el número uno fue crear una Comisión Nacional Anticorrupción para combatir con mayor eficacia lo que desde entonces ya se percibía como uno de los mayores problemas de la administración pública.

Presionado por una campaña en la que a su partido, el PRI, se le asoció con la corrupción, Peña intentó atemperar a la opinión pública y, en noviembre de ese mismo año, siendo todavía presidente electo, envió a través de la bancada priista en el Senado una iniciativa para crear la CNA.

La Comisión estaba diseñada para perseguir administrativamente la corrupción y sustituiría a la Secretaría de la Función Pública (SFP) por lo que esta dependencia desapareció de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, aunque siguió funcionando debido a que su extinción quedó supeditada al nacimiento de la nueva agencia.

El tema de la corrupción se diluyó durante los primeros dos años de gobierno, porque el Pacto por México y las reformas estructurales centraron el debate en lo que se presumía sería el despegue económico del país.

Sin embargo, el 9 de noviembre de 2014, el portal Aristegui Noticias dio a conocer que Angélica Rivera, esposa del Presidente, habitaba una residencia valuada en más de siete millones de dólares que estaba a nombre de una de las filiales de Grupo Higa, propiedad del empresario Juan Armando Hinojosa Cantú.

Un mes después, cuando este primer escándalo aún no se apagaba, The Wall Street Journal reveló que el entonces secretario de Hacienda, Luis Videgaray, había adquirido a la misma firma constructora una casa en Malinalco, Estado de México.

Ante la avalancha de críticas, Peña decidió revivir la Secretaría de la Función Pública que, para febrero de 2015, ya llevaba más de 790 días acéfala, y nombró como titular de la misma a Virgilio Andrade, un ex consejero del IFE afín al PRI, a quien le encargó investigar si existía algún conflicto de interés en la adquisición de la llamada Casa Blanca.

Tras exonerar a su jefe y con la creación del Sistema Nacional Anticorrupción, Andrade renunció el 18 de julio de 2016, y fue hasta el 27 de octubre de ese año que fue ratificada una nueva titular de la SFP: la senadora priista y ex procuradora Arely Gómez.

En diciembre de 2016, estalló un nuevo escándalo: en Estados Unidos se revelaron documentos sobre el pago de sobornos de la empresa brasileña Odebrecht a diversos...

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