David Shields / Proyecto Manzanillo
| Autor | David Shields |
El Proyecto Manzanillo se plantea como el desarrollo energético más importante de esta década en México. Arrancará a fines de este mes con dos concursos en paralelo, uno para el suministro de gas natural licuado (GNL) durante 25 años y otro para la construcción de una terminal de regasificación en la zona de Manzanillo, Colima.
La regasificadora comenzará operaciones el 1 de abril del 2010. El contrato de compra de 500 millones de pies cúbicos diarios de GNL será vigente a partir de esa fecha hasta el año 2035. Para completar el proyecto integral se prevé realizar otros dos concursos en el 2007, uno para la repotenciación de la central eléctrica de Manzanillo y otro para la construcción de un gasoducto de 230 kilómetros entre Manzanillo y Guadalajara. Habrá un sobrante de gas que se integrará al sistema nacional de gasoductos. En años posteriores, se tendrá la opción de duplicar o incluso triplicar el volumen de compra y almacenamiento de GNL en Manzanillo, con miras a cubrir la mayor demanda futura de gas en el Bajío y en el centro del País, sobre todo para generar electricidad.
El Proyecto Manzanillo ya genera expectativas de progreso en la región centro-occidente de México, ya que este nuevo suministro de gas podría dar sustento a un importante crecimiento económico e industrial en el largo plazo. También atrae la atención de inversionistas nacionales y globales, como se pudo constatar en una muy concurrida presentación del proyecto que les ofreció la Comisión Federal de Electricidad (CFE) la semana pasada.
Estudios internacionales auguran un gran crecimiento del negocio del GNL a nivel mundial en los próximos 30 años, sobre todo como opción de abasto energético en América del Norte y Europa. En México, el GNL se percibe como un insumo que podría dar un impulso al desarrollo en el Pacífico, además de diversificar opciones de suministro de gas y fortalecer el sistema de gasoductos y su integración al sistema eléctrico.
Sin embargo, es sabido que el Proyecto Manzanillo ha sido motivo de una álgida discusión sobre cuál debe ser el rumbo de la política energética nacional y, dentro de ésta, cuáles son los proyectos de GNL que deben promoverse con apoyo explícito del Gobierno federal a través de la CFE o Petróleos Mexicanos (Pemex). Hasta ahora, la CFE ha sido el vehículo para anclar proyectos de GNL en Altamira, en Ensenada y, ahora, en Manzanillo.
El Gobierno federal ha determinado que, por su magnitud, el Proyecto Manzanillo será un...
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