Dejan fuera a activistas

AutorLeslie Gómez

Eduardo Yera llegó ayer a la Catedral Metropolitana dispuesto a medir los decibeles de las campanadas para confirmar si el domingo pasado la Iglesia provocó la irrupción de perredistas. Se quedó con las ganas, porque los policías no lo dejaron entrar.

A Rubén Banda le ocurrió lo mismo al intentar pasar con una figura de unicel en forma de paloma de la paz. Lo mismo a Magdalena y sus compañeros, con pancartas contra el Cardenal Norberto Rivera.

Treinta elementos de la Policía Bancaria e Industrial en el acceso vestían uniforme, 16 más estaban adentro con traje, corbata roja y un pin en la solapa que los diferenciaba de los agentes de seguridad del templo.

A Gloria Ojeda Leyva, quien acudió al Sagrario por la primera comunión de su hijo, no la dejaban entrar porque en su bolsa traía una navaja suiza, que tuvo que dejar encargada con un comerciante. Todos los feligreses fueron revisados.

Armando Martínez Gómez, presidente del Colegio de Abogados Católicos, dijo que nadie se salvó. Al Obispo y demás sacerdotes también les tocó la revisión en la entrada. Como sea, ayer volvió a escucharse misa...

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