Dicen constructores que ellos cumplieron
| Autor | Dora Luz Haw y Julieta Riveroll |
Mexicana de Presfuerzo (Mexpresa) y Gutsa, empresas responsables, junto con ICA, de la construcción del "cascarón" de la Biblioteca Vasconcelos, se deslindan de cualquier responsabilidad por los problemas que sufre actualmente este inmueble.
"Hubo un acto de entrega-recepción de la obra donde el Comité Administrador del Programa Federal de Construcción de Escuelas (CAPFCE) aceptó nuestro trabajo, si lo hubiéramos hecho mal, obviamente no lo hubiera recibido", aseguró Juan Cuatecontzi, director comercial de Mexpresa.
Los representantes de ambas compañías coincidieron en que su obra sufrió problemas posteriores, ocasionados por el trabajo de otras empresas y aseguran que, aunque ellos ya terminaron con el cumplimiento de sus contratos, siguen colaborando en la corrección de daños recientes, por "profesionalismo".
"Hemos tenido que cambiar alrededor de 200 metros cuadrados de los 8 mil que colocamos. Legalmente digamos, no estábamos obligados, pero lo hicimos por convicción", señala Cuatecontzi.
La Biblioteca Vasconcelos, que tuvo un costo de mil 189 millones de pesos, cerró el 20 de marzo a fin de que el CAPFCE termine su construcción.
Entregan de forma apresurada
Mexpresa, con 30 años de experiencia y que ha participado en proyectos como el edificio conocido como El Pantalón, en Santa Fe, así como en la construcción de puentes y bodegas, construyó el edificio "C" de diciembre de 2005 a octubre de 2006, detalla Rosendo Plata, superintendente de la obra.
Tuvieron que realizar su trabajo apresuradamente porque los tiempos así lo exigían, pero esto no fue en menoscabo de la calidad, advierte.
"Fuimos los primeros en terminar la cimentación y la estructura, así como en entregar nuestra obra; sin embargo, fuimos de los últimos en salir, ya que tuvimos que colocar el plafón de los baños de servicio hasta que estuvieran terminadas todas las instalaciones. Por esta razón finalizamos su colocación unos nueve días antes de la inauguración de la Biblioteca", señala.
Durante el proceso, explica, surgieron varios inconvenientes que les obligaron a trabajar tiempo extra. Ejemplificó con el desplante de una columna, que no cabía en su placa base, y que solucionarlo les llevó de 4 a 5 días, tiempo que les resulta valioso en un programa tan restringido de entrega.
"Ahora que cerraron nos piden una limpieza al mármol, así como pintar una estructura metálica de la techumbre, pero nada más", insiste.
El ingeniero preve que varias de las placas de mármol se...
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