Diseñan casas para damnificados
| Autor | Teresa Martínez |
Para los afectados en Oaxaca por los sismos, maestros y alumnos de varias instituciones de educación superior diseñaron dos modelos de albergues provisionales que les podrán brindar a los damnificados un espacio para vivir, reforzar el tejido social de la comunidad, así como tiempo para reconstruir su patrimonio.
La iniciativa surgió del equipo de trabajo del Fab Lab de la Universidad de Monterrey (UDEM), laboratorio que pertenece a una red fundada por el MIT, dedicado a la investigación y producción de objetos y estructuras funcionales por medio de herramientas digitales.
Ellos convocaron a 114 estudiantes y académicos de distintas universidades para colaborar en el proyecto, platica Fernando Meneses, integrante del Consejo de Diseño y Fabricación Digital de la UDEM.
A distancia participaron integrantes de la comunidad académica de la Universidad de la Salle, la UNAM, el Tec de Monterrey Campus Zacatecas, y de instituciones extranjeras de Colombia y Venezuela. De la UDEM trabajaron 80 alumnos de distintas carreras, desde Arquitectura hasta Medicina.
En varias sesiones realizaron una lluvia de ideas, y luego tuvieron juntas de trabajo para definir el proyecto a seguir.
"Lo que se decidió es hacer un albergue con un acabado suficiente para que las personas puedan estar habitando en estos espacios, que les dé tiempo mental y físico, (para) superar el duelo, la pérdida económica y el patrimonio", señala Meneses.
"Y con un poco más de calma, empezar a recuperar las casas de cada uno".
El primer prototipo es una estructura de madera techada que puede convertirse en un espacio cerrado. En el interior del modelo se monta una hamaca para dormir, y en el suelo pueden colocarse colchonetas o catres dependiendo de las dimensiones.
Hace algunas semanas, un pequeño equipo de la UDEM acudió a Juchitán, donde armaron un prototipo de 2.44 por 7.32 metros. Cada unidad tiene un costo de construcción que ronda los 6 mil 500 pesos.
Todas las estructuras deben tener un espacio de 30 centímetros que separan al piso de la unidad del suelo exterior, detalla Meneses, para mantener seco el interior.
El diseño de estas unidades está pensado para que no se requiera trabajar los materiales ni hacer cortes numerosos. Por ejemplo, el prototipo que elaboraron tiene las medidas exactas de seis hojas de triplay.
"Nos pusimos una meta de 100 y ahora tenemos un donador que nos ofreció un tráiler para transportar; haciendo un cálculo, ahí cabrían 20 unidades como las que...
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