DOMINGRILLO
| Autor | Marco Antonio Flota |
Para volar, Peña Nieto cuenta con flota de aviones, helicópteros y una Gaviota.
López Obrador viaja en aviones de línea y no se enoja por los retrasos: lleva seis años en la sala de espera. Además, aprovecha para hacer campaña con los maleteros del aeropuerto, los otros pasajeros, hasta con la tripulación de las aeronaves, excepto con las azafatas, pues le piden senadurías, como Alejandra Barrales. El riesgo es que con tantos vuelos se haga adicto a los cacahuates: podría cazarlo el Rey Juan Carlos al confundirlo con un elefante. Marcelo Ebrard no lo acompaña en los viajes aéreos y si llega a la Secretaría de Gobernación, como le ha prometido AMLO, tampoco aceptará subirse a un avión. Josefina no tiene flota aérea, nomás rentó con una empresa privada 200 horas de vuelo, pero casi ni las usa: si se marea en tierra, en avión imagínese. Y es que dicen que el poder marea, pero marea más el no poder. Gabriel Quadri se desplaza en una combi, pero ya prometió cambiársela por una pinchi van, la ichi Maestra. Y si gana la Presidencia, le obsequiará una camioneta Hummer. Andrés Manuel ha criticado el gasto de Peña Nieto en aviones y éste podría responderle: "Dios no le dio alas... a los Pejes".
Josefina debería correr a todo su equipo y contratar al publicista español, pues más vale Sola que mal acompañada.
Aunque se sospecha que ya está en el war room el autor de la campaña aquella de "López Obrador es un peligro para México" y que diseñó la nueva: "Peña Nieto mentiroso". Pero el PRI no se queda callado: responde que el hombre del copete ha cumplido todos sus compromisos, incluso se comprometió con la Gaviota y le cumplió. Por eso el Coldwell se calentó y retó a los panistas a una Mesa de la Verdad, a la que no acudió Peña porque estaba con la beldad, pero mandó a su gente a enfrentarse a los azules. Y como diría Fox, casi se arma un zafacentro -pues el suyo ya no es rancho. El PRD prefirió denunciar a Quique ante el IFE, pero le respondió la autoridad electoral que se analizarán todos los gastos de campaña a su debido tiempo y se contabilizará "hasta la última botella de agua", o el último tanque de oxígeno (tratándose de Josefina), o el último bote de gel (tratándose de Peña), o el último filtro de amor (tratándose del Peje). Tratándose de Quadri no se sabe si contabilizarán lo que él gaste en votos o lo que en botox gaste la Maestra, quien por...
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