Economía sobre Ruedas
| Autor | Roberto Avilés |
Carabela en Naucalpan
Con la firme intención de fabricar un producto principalmente mexicano, la empresa Carabela iniciará formalmente la construcción de su línea de ensamble en Naucalpan, Estado de México.
La idea es tener en el mercado un producto Carabela mayoritariamente nacional para fines del año 2006; en otras palabras, el proceso de búsqueda de proveedores nacionales durará todo el 2005 y parte del 2006.
La firma Carabela se fundó en México a partir de una fábrica de bicicletas llamada ACERMEX, compañía creada por Walter y Egone Hessel.
Apoyados por la asesoría técnica del italiano Remo Vecchi, los hermanos Hessel crearon en 1957 las motos Carabela, cuya fabricación estaba conformada por un 70 por ciento de partes hechas en México Para poner ese nombre, Vecchi se inspiró en un famoso avión francés que participó en la Segunda Guerra Mundial llamado Carabel.
A partir de entonces, las motos de trabajo y las mini motos para los niños se convirtieron en los vehículos Carabela preferidos de los clientes mexicanos. En sus mejores tiempos se vendieron 30 mil unidades anuales todas ellas manufacturados con mano de obra nacional.
Al fallecer los fundadores y dueños, los hermanos Hessel, la empresa ya no funcionó igual y se vendió al grupo empresarial Alfa.
A finales de 1987, la empresa Carabela suspendió la venta y producción de motocicletas y simplemente se dedicó a vender refacciones.
A 14 años de haber cerrado, en el 2001 una compañía con capital mayoritariamente mexicano llamada Moto Road adquirió los derechos de la marca y reinició la distribución de motos con la marca Carabela.
Dirigida por Mauricio Kershenobich, la planta mexicana Carabela podría fabricar anualmente cerca de las seis mil unidades. Actualmente y hasta que inicie formalmente la producción en la planta de Naucalpan, el 100 por ciento de las partes de esta firma mexicana se importan desde China.
Un híbrido de GM
Lo que urge en el Distrito Federal es la introducción de tecnología automotriz anticontaminante. A este respecto, General Motors de México puso a consideración de las autoridades capitalinas una opción de autobús híbrido cuyo sistema motriz funciona indistintamente con diesel o energía eléctrica.
El vehículo fue desarrollado por la subsidiaria Allison Transmission y tiene como ventaja principal la posibilidad de reducir la emisión de hidrocarburos y monóxido de carbono en un 90 por ciento.
Podría ser utilizado en el sistema Metrobús que está próximo a ponerse en...
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