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Eduardo R. Huchim / INE: arrendar caro

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Vincent
AutorEduardo R. Huchim

Suponga que necesita usted un vehículo y tiene dos opciones: arrendarlo por $100 pesos durante cuatro años o comprar en $47 la misma unidad y con las mismas condiciones. ¿Cuál opción preferiría usted? La respuesta es obvia, pero el Instituto Nacional Electoral determinó lo más caro y arrendó, en vez de comprar.

Esta historia comenzó el 28 de enero de 2015, cuando el INE firmó un contrato abierto plurianual de prestación de servicios con la empresa Jet Van Car Rental, por un monto de 912.9 millones de pesos.

El total de vehículos rentados fue de 1,096 y estaban destinados a las juntas distritales, donde servirían para las labores de campo del INE. También se incluyeron 22 camionetas jeep Cherokee para funcionarios de primer nivel y 12 camionetas Dodge Durango para los consejeros. Aunque el monto inicial de la renta de los vehículos por cuatro años prácticamente duplicaba el costo de venta de esas unidades, Bogart Montiel Reyna, director ejecutivo de Administración, explicó que a mediano plazo habría un ahorro de 20% (Reforma, 25/04/15).

Tal ahorro sólo existió en la optimista declaración del director ejecutivo, porque un análisis de la Contraloría del INE, incluido en su informe de gestión 2015, determinó que era más barato comprar los vehículos que rentarlos. El contralor Gregorio Guerrero Pozas lo expresó así: "El esquema de adquisición claramente supone una alternativa más económica en comparación con el esquema del servicio de arrendamiento que el Instituto contrató para 1,096 vehículos".

Para llegar a esa conclusión, la Contraloría confrontó, en una investigación de mercado, el contrato de arrendamiento con la oferta de los mismos modelos y servicios por la vía de la adquisición, bajo las condiciones más onerosas y criterios más conservadores.

La evaluación de rentabilidad consideró dos escenarios: 1) Adquisición del parque vehicular con salvamento después de cuatro años, es decir subastándolos al público en 20% de su valor original, de acuerdo con la Ley del Impuesto Sobre la Renta; 2) Adquisición sin salvamento, es decir, después de cuatro años el Instituto se quedaría con esos vehículos como activos.

Resultado: En el escenario 1, la adquisición con...

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